En la actualidad, Franklin Mirabal, de los Tigres del Licey y Santana Martínez, de las Aguilas Cibaeñas, son los dos principales narradores de béisbol de Lidom. Entre los dos, tienen más de 100 frases pegadas, algo que agrada a los fanáticos. Del pasado, hay nombres ilustres como Billy Berroa, Lilín Díaz, Félix Acosta Núñez, Max Reynoso, Mendy López hasta Roosevelt Comarazamy, que adornan gloriosas páginas.
Billy Berroa, nacido en San Pedro de Macorís, es considerado el más importante narrador quisqueyano de todos los tiempos. “El Internacional” como era apodado, se caracterizó por adentrarse al juego en su descripción. Frases como :“Línea para el leftfielder la bola pica buena, se va a la profundo, va hacer extrabase y es doble para …… “Batazo profundo para el centerfield va atrás la bola, atrás, atrás, atrás y atrás y la botó cuadrangular para ….. “Strike tirándole al tercero y el hombre es ponchado”, “Batazo para atrás, atrás y atrás, no lo van a creer pero se acabó el partido, cuando era para ganar”.
Todo ese “glamour” y profesionalidad para describir un juego de pelota lo hicieron merecedor de ser un finalista para el Salón de la Fama de Cooperstown de los Estados Unidos.
De su lado, Lilín Díaz, oriundo de Santiago, ha sido sin duda alguna el más rápido y descriptivo narrador dominicano. Era extraordinario escuchar narrar a Lilín un doble, un triple o un jonrón. Recuerdo siendo niño oír narrarlo un jonrón, luego de Miguel Guelo Diloné cuadrarse para tocar, de las Aguilas Cibaeñas, frente mi equipo azul de los Tigres del Licey.
Podría pronunciar las palabras tan rápidas que parecía uno estaba dentro de la acción del juego de pelota, y mucho más con el Estadio Cibao repleto de fanáticos y su fiel seguidor animador anónimo voceando “McCovey, McCovey, McCovey ”.
Félix Acosta Núñez fue uno de los más aclamados y laureados cronistas deportivos nacionales. Su voz y sus comentarios se extendieron por América Latina. El “as” como le llamaban hizo vibrar de emoción a los fanáticos de los Leones del Escogido. Su inconfundibles slogans: “¡La bola se va, se va, se va y se fue!”, “¡Ahí vienen los tanques del Licey!”, “Los tres paticos”, en alusión al conteo de dos bolas, dos strikes y dos outs anotados en la pizarra”.
Luego aparece en el escenario el cronista deportivo Mendy López, nacido en Pimentel, provincia Duarte, quien rápidamente escaló en el gusto de la fanaticada de los Leones del Escogido, ya que narró junto a Acosta Núñez y Jorgito Bournigal.
Sus expresiones: “Balazo en la esquina de afuera”, “Liiiiindo strike en la esquina de adentro bordado con hilo mamey”, “Esa bola venía chorreando veneno”. Así como:” Ni alta, ni baja, ni afuera, ni adentro, bola dijo el árbitro”. Son frases que perdurarán por siempre en el gusto de esos amantes seguidores del béisbol romántico y en algunos de la nueva era.
Aunque cabe señalar que a pesar de iniciar su carrera con los Leones, ha sido con las Aguilas Cibaeñas que Mendy ha brillado como narrador.
El ícono de la crónica deportiva Max Reynoso también narró para los Tigres del Licey. Su frase “Palomita de Maíz” fue admirada por muchos a la hora de identificar un elevado inofensivo conectado por un bateador.
Cerrando con esa gran época dorada de la narración se une al grupo el más completo y multifacético narrador dominicano, Roosevelt Comarazamy, quien con un estilo único escala peldaño jamás nunca visto por otros colegas de la prensa.
Expresiones como: “Bien atrás, bien atrás, bien tras, así como batazo de sastrería” fueron claves en su acogencia por la fanaticada. En cuando a la primera frase, Comarazamy dijo en vida que nació narrando softbol con los Astroboys de Toshiba.
Ya en la actualidad, los cronistas deportivo Franklin Mirabal, de los Tigres del Licey, y Santana Martínez, de las Aguilas Cibaeñas, se convierten en los principales narradores del béisbol invernal dominicano.
Frases como: “Quítense del Medio”, “Señoooores”, “Qué bonita se ve esa pizarra”, “Lo engañó como a un niño Chiquitito”,” Viene una, viene otra”, “Trueeeno”, “Me voy a poner malo”, “Here is the pitch”, “Nooo, pero así no”, “I Can’t Believe It”, “Me comen las manos”, entre otras, han colocado a Mirabal en la cúspide de la narración dominicana.
Mientras Santana Martínez da colorido a sus descripciones con slogans como : “La puso amarillita”, “Tiene mieo” o “La bailó con swing”, “Recojan que ganaron las Águilas”.
Otros grandes de la narración dominicana han sido: Papy Pimentel, Ramón de Luna, Danilo Domínguez (Y chelo gozando), José Bejarán, Radhamés González (La bola tiene dirección, dirección y Estámina, jonrón”. Juan Báez, Osvaldo Rodríguez Suncar, Guelo Tueni, Radhamés González, Idelfonso Ureña, Ramón Henríquez, Johnny Trujillo y Braulio Mejía. Así como José Antonio Mena, Manuel Acevedo, Daniel Javier, Luis Angel Mota, Orlandito Méndez, El Rubio Blondie, Ricky Noboa, Melvin Bejarán, Juan José Rodríguez, Ernesto Kranwinkel, entre otros.