Aunque parezca una quimera, Grecia, el país que ha sido tres veces rescatado y está endeudado hasta las trancas, está pagando menos por colocar su deuda que Estados Unidos, el país más seguro del mundo.
El bono griego a 10 años cotizó el miércoles con una rentabilidad del 2,049% por debajo de la del bono de EEUU.
Si no fuera por la Reserva Federal que el miércoles bajó 25 puntos básicos los tipos de interés, Atenas podría financiarse a un coste inferior que EEUU, “algo que a priori parece una proeza pero en realidad es el reflejo de unas expectativas de inflación mucho más bajas y de la debilidad de la Eurozona (y de Grecia), entre otros factores, que hacen del sorpasso de Grecia a EEUU algo más bien anecdótico”, según explica una publicación del diario español El Economista.es.
A diferencia de lo convencional, el riesgo de default probablemente no es la causa de las mayores rentabilidades del bono de EEUU respecto al de Grecia.
“El mercado de credit default swaps, los conocidos como CDS que funcionan de seguro contra posible impagos de países o empresas, se mantienen muy bajos y estables con la deuda de EEUU, muy lejos todavía de los CDS de Grecia, algo más altos”, agrega.
Agrega que “esta diferencia puede residir en varios factores que no tienen demasiado que ver con el riesgo de impago. Una combinación de una mayor inflación esperada en EEUU, crecimiento real, déficit fiscales y una política monetaria más restrictiva (respecto a la del BCE) han contribuido a estrechar las diferencias hasta la inversión que se ha producido hace unos días”.
El crecimiento de los déficit fiscales previstos (ante las políticas fiscales de Trump), frente al principio de equilibrio fiscal en Grecia, probablemente han contribuido al incremento relativo de las rentabilidades.