La Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC) advirtió ayer que una reforma fiscal que conlleve cargas impositivas para los sectores de menos ingresos económicos debe ir acompañada de un incremento salarial que compense “este nuevo sacrificio”.

Hablando a nombre del gremio, el secretario general adjunto de la CASC, Luciano Robles, consideró que ese y otros aspectos de carácter laboral serán parte de los retos que deberá enfrentar el Presidente electo, Danilo Medina, a partir del 16 de agosto cuando asuma el poder.

  Mientras Rafael Abreu (Pepe), secretario general de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), dijo que otros retos que deberá enfrentar el nuevo Gobierno que encabezará Medina, son las intenciones del sector empleador de propiciar enmiendas al Código de Trabajo para eliminar conquistas de muchos años como la cesantía laboral.

Abreu dijo que los patronos representados por la Confederación Patronal Dominicana (Copardom) y el Consejo Nacional de  la Empresa Privada (Conep) tienen “bajo la manga”  unas 28 propuestas de enmiendas al Código de Trabajo con las que buscan eliminar conquistas que se lograron a base de muchos sacrificios.

El secretario general de CNUS deploró que el sector patronal no haya hecho saber cuáles son las reales intenciones de propiciar enmiendas al Código de Trabajo sin darlo a conocer previamente a las confederaciones de trabajadores.

Luciano Robles y Abreu coincidieron en plantear la necesidad  de que tanto el Gobierno como los empleadores   propicien enmiendas a la Ley 87-01 sobre Seguridad Social.