El Grupo Humano arribó a su decimoquinto aniversario y qué mejor manera de celebrarlo que con una misa de acción de gracias oficiada en la Catedral Primada de América por monseñor Francisco Ozoria Acosta.
La ocasión fue propicia para presentar las memorias corporativas que recogen los primeros quince años de trayectoria de la empresa y que muestran diversas acciones de alto impacto en la sociedad, como su programa de responsabilidad social Humano de Corazón, enfocado en el bienestar de niños con enfermedades de alto costo y complejidad, así como proyectos para la preservación de la salud materno-infantil y en la prevención de factores de riesgo para las personas.
Eduardo A. Cruz, presidente ejecutivo de Humano, ofreció las palabras de agradecimiento en representación de los miembros de la organización.
“El agradecimiento es la memoria del corazón -dijo-, por esto, hoy compartiremos con ustedes nuestras memorias institucionales, que recogen nuestra historia y visión, los planes que tenemos a futuro y la gratitud que sentimos hacia todos ustedes por contribuir con su apoyo al desarrollo de Humano”, expresó Cruz.
Dijo que llegar a un aniversario más como una de las principales administradoras de riesgos de salud del país es el resultado de la gracia divina.
“Queremos seguir como una huella indeleble en la sociedad”, manifestó.
Como plan a futuro la institución concentrará sus áreas de servicios en el Campus Humano, una localidad que proveerá un espacio más eficiente y accesible, arrendada a un importante fondo de inversiones inmobiliarias. “Desde allí la institución ofertará con mayor eficiencia sus servicios a través de novedosas facilidades para clientes, intermediarios y prestadores”.
Al encuentro asistieron ejecutivos de la organización, autoridades gubernamentales, colaboradores, amigos y relacionados.