El presidente del grupo Punta Cana, Frank Rainieri, afirmó ayer que ese consorcio ha tomado las medidas para mitigar el cambio climático como lo es la creación de su Fundación Ecológica, la resiembra de corales y adquirir plantas residuales de calidad.
Destacó que los hoteleros de esta región respetan las alturas, las densidades, en la zona no permiten más de 35 habitaciones por hectáreas, y tratan de que los hoteles con más de 500 habitaciones tengan 250 metros de frente de playa para no cargarla más de la cuenta.
No obstante, dijo que hay situaciones del cambio climático que no dependen de ellos, como los sargazos, que no se producen aquí.
Rainieri se refirió en esos términos ante la Comunicación Nacional para el Cambio Climático que alerta sobre las consecuencias que tendrían en tres polos turísticos el cambio climático y que a pesar del panorama, el país no toma las medidas de adaptación.
Explicó que la industria turística del Caribe depende del sol, mar y la playa, y los tres componentes son importantes, “pero no podemos ir a los extremos, tenemos que tomar medidas todos, hay que preservar el medio ambiente, y esto debe ser un plan no de críticas, si no de trabajar juntos”.
Arrabalización. En otro orden, Rainieri dijo que les preocupa el problema de la arrabalización de Bávaro, donde han tenido que construir viviendas sociales para tratar de solucionar este inconveniente. “No podemos esconder la realidad, una de las luchas nuestras ha sido el tema de la arrabalización, que nos preocupa”.
Indicó que en esta semana se reunió con el director del municipio para hablar sobre un plan de ordenamiento que realizó hace más de doce años la Asociación de Hoteles para el Ministerio de Turismo, y que se debe ejecutar.
“Lo que no se puede vivir es como chivos sin ley; lo malo es que hacemos lo que nos da la gana, unos porque son grandes y otros porque son pobres padres de familia, no podemos continuar con esa actitud”. Rainieri habló al salir del coloquio empresarial sobre salud cardiovascular que organizó Cedimat.