Grupos buscan inmigrantes sean fuerza electoral
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Grupos buscan inmigrantes sean fuerza electoral <BR>en EU

NUEVA YORK (AP).– «Hoy marchamos. Mañana votamos”. Ese fue uno de los lemas más populares durante la reciente ola de manifestaciones a favor de la causa de los inmigrantes y los promotores de esas movilizaciones quieren hacerlo realidad.

En toda la nación se realizan campañas para estimular la participación de los extranjeros en las elecciones, la cual ha sido tradicionalmente baja, y para que millones de personas con derecho a la ciudadanía inicien el trámite.  «¨Cómo convertimos esta fuerza a nivel de base en poder político?’’, preguntó Chung-Wha Hong, director de la Coalición de Inmigración de Nueva York. «Siempre trabajamos con el electorado, pero ahora estamos haciendo un esfuerzo especial’’.

Estas organizaciones tienen programadas numerosas actividades el lunes primero de mayo, en que hay convocadas manifestaciones a favor de los inmigrantes. La campaña continuará hasta las elecciones legislativas de noviembre y el siguiente objetivo serán los comicios presidenciales del 2008.

En un acto reciente en San Diego, 5.000 personas se registraron para votar, según Jesse Díaz, de la Coalición 25 de Marzo. Militantes de toda California están exhortando a la prensa hispana a que «ayude a explicarles la importancia de participar en las elecciones’’, según Díaz. «El movimiento se está enfocando ahora en el voto’’.

Muchos inmigrantes indocumentados que no pueden votar visitan a parientes, vecinos y compañeros de trabajo y los instan a que voten, indicó Cecilia Muñoz, del Consejo Nacional de La Raza. Esa organización está lanzando un nuevo proyecto tendiente a promover la participación en las elecciones llamado Leap to Action. La campaña incluirá la distribución de panfletos con información acerca de los comicios y avisos en radio y televisión.

En Chicago, personas con experiencia en estas campañas se movilizarán durante seis meses en 15 barrios mayormente hispanos a partir de junio. El objetivo es registrar a 10.000 personas que nunca habían votado para los comicios de noviembre, indicó Joshua Hoyt, director de la Coalición de Illinois para los Derechos de los Inmigrantes y los Refugiados.

El Centro Hispano Pew dijo que el 61% de los hispanos que había en el país en el 2004 no podían votar porque no tenían papeles o porque eran demasiado jóvenes. Solo el 6% de los votantes fueron hispanos en las elecciones presidenciales del 2004.

«El proceso electoral es a veces tan abstracto, que no parece relevante para la vida diaria de la gente’’, señaló Clarissa Martínez de Castro, directora del área de políticas públicas de La Raza. «Este debate (en torno a reformas migratorias) le mostró a la gente cómo los procesos políticos pueden tener un impacto en la vida cotidiana’’.

Hay quienes pronostican que habrá un aumento en los pedidos de nacionalización.

«El gigante dormido se está despertando’’, dijo Hoyt.

Los índices de nacionalizaciones subieron en California en la década del 90, de acuerdo con el Instituto de Políticas Públicas de California, y una de las principales razones de ello fueron los acontecimientos políticos, en particular una ley estatal aprobada en 1994 que impidió a los indocumentados estudiar y obtener servicios médicos. No entró en vigor porque los tribunales la declararon inconstitucional, pero causó enorme malestar entre los inmigrantes y los empujó a que se involucrasen en la política.

Un proyecto legislativo que convertiría a los indocumentados en delincuentes podría tener el mismo efecto.

En marzo hubo 1.800.000 llamadas pidiendo formularios electrónicos de ciudadanía, según Christopher Bentley, del Servicio de Inmigración y Ciudadanía.

Unos 8.000.000 millones de inmigrantes están en condiciones de solicitar la ciudadanía y no lo han hecho, informó el Departamento de Seguridad Interior. Casi la mitad son oriundos de Latinoamérica, un tercio de ellos de México.

La obtención de la ciudadanía, y del derecho a votar, es un primer paso. El siguiente es decidir por quién se vota y es previsible que los inmigrantes opten por candidatos que defienden su causa.

«Algunos de nosotros estamos incluso pensando en postularnos’’ a cargos públicos, dijo Díaz, quien tiene 42 años y está cursando estudios avanzados de sociología en la Universidad de California en Riverside. «Este es el momento indicado para que todos los latinos aprovechemos el clima imperante y comencemos a cambiar la ola del poder político’’.

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