Una veintena de organizaciones del exilio cubano en Miami se concentró ayer en el centro urbano de la ciudad para expresar su rechazo a las “infames concesiones” hechas por el presidente de EE.UU., Barack Obama, al “régimen tiránico de Raúl Castro».
La airada protesta del exilio, que discurrió pacíficamente por el Parque José Martí, a pocas manzanas de la emblemática Calle Ocho de La Pequeña Habana, concentró sus principales ataques contra la “traición”, “claudicación” y “nefastas medidas” de Obama. “Sentimos mucho dolor.
El presidente Obama piensa que con sus medidas va a ayudar al pueblo de Cuba y no es así. Esto ayuda al Gobierno de Cuba a fortalecer y equipar su maquinaria represiva para reprimir al pueblo cubano y la sociedad civil”, dijo Berta Soler, líder del grupo disidente Damas de Blanco.
La disidente resaltó el hecho de que los cubanos de dentro y fuera de la isla constituyen “un solo pueblo” unido por el “dolor» ante el anuncio de la normalización de las relaciones diplomáticas entre EE.UU. y Cuba.
La concentración se produce tres días después de que Obama anunciara el inicio de un proceso de normalización de las relaciones bilaterales.