Guardianes privados acusados de dos crímenes

Guardianes privados acusados de dos crímenes

Un vigilante que mató a otro que estaba «fichado» en los archivos de la Policía Nacional fue apresado, en tanto que se busca a otro celador que drogó a dos compañeros para que maleantes penetraran y robaran en la compañía donde prestaban servicios.

De acuerdo con un informe de la Policía, David Duarte Pérez, de 21 años, disparó contra Luis Bernardo Leocadio, de 29, en la calle Centro Olímpico esquina Biblioteca Nacional, en el sector El Millón, de esta capital.

Según la Policía, Duarte Pérez y Leocadio sostuvieron una riña en el referido sector que culminó en la desgracia.

De Leocadio, la Policía confirmó que estaba registrado en los archivos de esa institución por la comisión de robos y que fue encontrado con heridas de balas en el tórax y la mano izquierda, disparadas por Duarte Pérez con un revólver marca Smith & Wesson, calibre 38, propiedad de la compañía de vigilantes.

Por su lado, Duarte Pérez presenta traumas en el hombro y en el cráneo, que supuestamente se las ocasionó Leocadio con un trozo de metal. El hombre recibió atenciones médicas en el hospital del Palacio de la Policía Nacional, que lo someterá a la justicia.

[b]LOS DROGO[/b]

En otro hecho, la Policía persigue activamente al vigilante Simule Sosa, de la compañía Guardianes Máximo, quien supuestamente dio a tomar a sus compañeros de servicio un «extracto de malta con una sustancia desconocida».

Sus compañeros fueron identificados como Leonardo Arias y Angel D`Oleo Ogando, quienes laboraban como vigilantes de la compañía Acromax Dominicana, de la avenida 27 de Febrero, esquina Luperón, en la zona Industrial de Herrera.

De acuerdo con la versión policial, Sosa permitió la entrada de otros desconocidos que mientras Arias y D`Oleo Ogando estaban drogados, rompieron los protectores de metal de una ventana de cristal y penetraron al local.

Tanto el vigilante como los desconocidos huyeron con la escopeta que portaba para su servicio, y aparentemente «no sustrajeron nada del local».

Arias y D`Oleo Ogando fueron internados en el hospital Salvado B. Gautier, donde actualmente reciben atención médica.

[b]EN EL ACTO[/b]

Un cabo policial disparó contra un joven de 28 años que, según la Policía, encontró «en el acto» mientras alegadamente cometía un delito frente al destacamento policial de Guachupita, donde el agente estaba de servicio.

De acuerdo con la versión policial, el cabo Abelardo Cuevas Santana disparó contra Alicarán Omar Disla cuando escuchó la rotura de un cristal del vehículo y al dirigirse al lugar para averiguar, observó que éste se encontraba en el interior del referido automóvil.

No obstante, cuando éste se dio cuenta de la presencia del agente y de que había sido descubierto, siempre de acuerdo a la Policía, se lanzó contra su arma y el cabo le disparó.

[b]CUIDEN MI PERRO[/b]

Un hombre de 73 años que sufre de diabetes intentó suicidarse luego de que, producto de su enfermedad, le amputaron una pierna.

Simón Bolívar Lapaix, de la comunidad de Boca Chica, se disparó en la cabeza con un revólver marca Smith & Wesson, calibre 38 que porta de manera legal.

Sin embargo, sus fines suicidas no tuvieron resultado, ya que éste se encuentra recibiendo atención médica en la Plaza de la Salud, de esta capital.

Conforme a versiones de sus parientes, Lapaix se levantó a tempranas horas de la mañana, se dirigió al balcón de su vivienda en la calle 24 de Junio, del referido sector y conforme a testigos oculares del hecho, se disparó en la cabeza.

Aparentemente éste había tomado alcohol, ya que los investigadores policiales encontraron una botella de Whisky y junto esta un manuscrito que decía: «Solo quiero que cuiden a mi perro y a mis pajaritos».

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