POR MARGARITA QUIROZ
Guayaba, guara, arazá, hurapo, piche, sahuinto, arrayán y luma, son algunos de los de los nombres con los que se conoce este fruto en diferentes países de Latinoamérica. No obstante, su apelativo común es guayaba y de esta forma es conocida en la República Dominicana.

Su nombre inmediatamente denota trópico: sol, verdor y exuberancia. Y sí, efectivamente es una fruta netamente tropical, procedente de México, Brasil, Cuba, Colombia, Perú, Ecuador, India, Sudáfrica, California, Estados Unidos, Filipinas, Venezuela, Costa Rica, Cuba, Puerto Rico y República Dominicana, aunque en este último país no se produce en grandes cantidades.

Actualmente, una sola guayaba puede costar entre RD$30 a RD$40, cara si se toma en cuenta que con RD$10 se compran tres guineos o dos naranjas. Tal vez, esta sea la razón por la cual este cítrico no es consumido de forma masiva en el país.

Esta fruta pertenece a la familia de las Mirtáceas que incluye más de 3.000 especies de árboles y arbustos de los cinco continentes. Muchas de sus especies son muy aromáticas, como el eucalipto. Todas las guayabas las producen árboles del género Psidium.

La variedad de formas, colores y sabores es uno de sus principales atractivos, aparte del intenso y tentador aroma que exhala cuando ha alcanzado la madurez. Por sus propiedades nutritivas y aporte de sustancias de acción antioxidante, aliadas de la salud, su consumo es adecuado para los niños, los jóvenes, los adultos, los deportistas, las mujeres embarazadas o madres lactantes y las personas mayores.

A diferencia de otras frutas, la guayaba se produce todo el año y para mantenerse fresca puede almacenarse en la nevera por 7 a 10 días.

Con las guayabas se preparan infinidad de dulces muy apetitosos que sirven también como alimento sano y nutritivo. Cocidas con azúcar y canela, se prepara la muy conocida mermelada o jalea.

Un dato muy importante, ofrecido por los especialistas en nutrición, es que de cualquier manera que se coma, tiene las mismas propiedades alimenticias y medicinales, pues no se alteran los elementos nutritivos ni sus principios activos.

APORTE A LA SALUD

Por su aporte de vitamina C y provitamina A, se recomienda su consumo a toda la población, y especialmente a quienes tienen un mayor riesgo de sufrir carencias de dichas vitaminas: personas que no toleran los cítricos, el pimiento u otros vegetales, que son fuente casi exclusiva de vitamina C en la alimentación; para quienes deben llevar a cabo una dieta baja en grasa y por tanto con un contenido escaso de vitamina A o para personas cuyas necesidades nutritivas están aumentadas.

Las vitaminas C y A, como antioxidantes, contribuyen a reducir el riesgo de múltiples enfermedades, entre ellas, las cardiovasculares, las degenerativas e incluso el cáncer. La vitamina C aumenta la absorción del hierro de los alimentos lo que beneficia a las personas que tienen anemia ferropénica. Su contenido de fibra soluble le confiere propiedades laxantes. Además, por su bajo contenido de hidratos de carbono, riqueza en potasio y bajo aporte de sodio, resultan muy recomendables para aquellas personas que sufren de diabetes, hipertensión arterial o afecciones de vasos sanguíneos y corazón. Su contenido de potasio deberán tenerlo en cuenta las personas que padecen de insuficiencia renal y que requieren de dietas especiales controladas en este mineral. Sin embargo, quienes toman diuréticos que eliminan potasio y las personas que tienen bulimia, se beneficiarán de su consumo, ya que en la guayaba abunda dicho mineral.

CARACTERÍSTICAS Y CONSUMO

Según la variedad, la guayaba puede tener forma redondeada semejante a un limón o bien estrecharse hacia el pedúnculo, tomando una forma parecida a la pera.

Bajo la cáscara se encuentra una primera capa de pulpa, consistente, firme, de aproximadamente 0,25 centímetros de espesor, variable según la especie.

La capa interior es más blanda, jugosa, cremosa y está repleta de semillas de constitución leñosa y dura. El sabor de la pulpa recuerda al de la nuez y la avellana.

La guayaba se consume fresca (verde o madura), en batidos, zumos, helados, compotas, mermeladas y jaleas. Una de las mezclas que más enriquece a la guayaba es la combinación con lácteos (leche, queso, yogur).

Para tomar fresca la parte interior de la guayaba, donde se encuentran las semillas, debe masticarse bien o pasarse por un pasapurés. La parte externa de la pulpa del fruto carece de semillas y es más suave.

La fruta se debe recolectar antes de que tome color para evitar posibles enfermedades y descomposición. La forma de recolección es manual, en los sistemas tradicionales se recogen los frutos caídos del suelo.

PROPIEDADES NUTRITIVAS

Su componente mayoritario es el agua. Es de bajo valor calórico y escaso aporte de hidratos de carbono, así como de proteínas y grasas. Destaca su contenido en vitamina C; concentra unas siete veces más que la naranja. Aporta en menor medida otras vitaminas del grupo B (sobre todo niacina o B3, necesaria para el aprovechamiento de los principios inmediatos, hidratos de carbono, grasas y proteínas). Si la pulpa es anaranjada, es más rica en provitamina A (carotenos). Respecto a los minerales, destaca su aporte de potasio.