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POR ENRIQUE ROJAS
ESPNdeportes.com
ORLANDO, Florida El jardinero dominicano José Guillén llamó el jueves a sus colegas de Grandes Ligas para unirse en un plan de emergencia para socorrer las víctimas que dejó a su paso por República Dominicana, el pasado fin de semana, la tormenta Noel.
Más de 60 muertos, 27 desaparecidos, cientos de heridos y 40 mil desplazados es el balance trágico que hasta el momento dejaron Noel y las lluvias subsiguientes que afectaron el territorio dominicano en los últimos días.
Es una tragedia, una de las peores que he visto, dijo Guillén a ESPNdeportes.com desde Santo Domingo.
Ahora es un momento indicado para mostrar nuestra unidad y el gran amor que tenemos por nuestros semejantes, agregó el jugador de los Marineros de Seattle.
Todos los peloteros debemos unirnos y ayudar a nuestras comunidades, desde ya estoy tratando de ponerme en contactos con el gobierno y las organizaciones que tradicionalmente acuden en ayuda de los más afectados, dijo Guillén.
El presidente de la república, Leonel Fernández, declaró el país en estado de emergencia por 30 días y clamó por la solidaridad internacional para enfrentar los graves daños que provocó las tormenta Noel a su paso por la isla La Hispaniola, que comparten República Dominicana y Haití.
Entre los dos países han reportado más de cien muertos. Solamente en Dominicana colapsaron 25 puentes y se produjeron pérdidas económicas valoradas en más de 300 millones de dólares.
El gobierno dominicano inició, el miércoles, la gestión de dos préstamos internacionales de 100 millones de dólares cada uno, asi como el desembolso por adelantado de otros préstamos que han sido aprobados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BM) para enfrentar la tragedia.
Con más de 100 peloteros, algunos que figuran entre los que más dinero devengan, República Dominicana es el país extranjero con más representantes en las Grandes Ligas del béisbol de Estados Unidos.
No podemos dejar todo el trabajo al gobierno, cada dominicano en posición de ayudar debe hacerlo, dijo Guillén.
Necesitamos movernos pronto antes de que las enfermedades que siguen a este tipo de sucesos comiencen a afectar a los más débiles, que son los niños. Tengo dos hijos y pienso que cualquiera de ellos pudo estar entre las víctimas, agregó Guillén.
