El economista Guillermo Caram consideró que los Objetivos de Desarrollo del Milenio no han sido debidamente alcanzados en el país por una equivocada estructura del gasto público.
En ese sentido manifestó que para que la inversión pública se refleje en bienestar de la ciudadanía tiene que haber una inversión sustentada en el ahorro interno, en recursos del Estado, de los contribuyentes, y no con fondos financiados por organismos internacionales.
Dijo que cuando la inversión pública se financia con organismos internacionales y/o bancos privados no genera un beneficio sustancial para la ciudadanía.
Argumentó que los fondos financiados por éstos casi siempre van dirigidos a megaproyectos en los cuales se utiliza un alto componente en tecnología, maquinarias y equipos, y poca mano de obra.
Entonces, para que haya un beneficio de la inversión pública en favor de la economía dominicana y de los dominicanos tiene que haber necesariamente una inversión pública financiada con ahorros internos del gobierno. Y ese ahorro interno a su vez, tiene que lograrse con disminución de los gastos corrientes, dijo.
Caram habló del tema al ser consultado por este diario sobre las declaraciones del representante local del Banco Mundial, Roby Senderowitsch, que insistió el miércoles en que el país tiene que mejorar la calidad del gasto público y hacer que la inversión pública dé mayores resultados para la ciudadanía, y que sino lo hace no podrá cumplir con los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Definición. Los Objetivos de Desarrollo del Milenio, respaldados por los gobiernos en Naciones Unidas en el 2000, buscan la mejora del bienestar humano mediante la reducción de la pobreza, entre otros aspectos, a nivel global.
En ese sentido Caram dijo que la inversión pública que se necesita en el país debe estar dirigida a satisfacer necesidades sociales, tales como obras paea los campesinos y barrios, y por otro lado a fortalecer el aparato productivo nacional que está huérfano de aliento gubernamental en estos momentos.