JOSÉ M. RODRÍGUEZ HERRERA
SAN PEDRO DE MACORIS.- Hijo de don Emilio Pellerano Cohén y doña Luz del Carmen Velázquez, Miguel Enrique, que así se llama Guillín, nació en San Pedro un 29 de septiembre de 1937, y es el menor de ocho hermanos que procreó el matrimonio, de los cuales quedan dos: Luis y nuestro personaje.
Casado desde hace 42 años con la profesora Rosa Estela Heureaux (nieta de Lilís), residen en su pueblo desde siempre en la 27 de Febrero No. 20. Tienen varios hijos, algunos profesionales, y nietos.
Fue Guillín un sobresaliente pelotero amateur en su adolescencia y juventud, y reforzó, en diferentes ocasiones, los equipos campeones regionales del Este, Romana, Angelina y San Pedro, jugando el campo corto. Como asimilado militar participó en la novena de la Fuerza Aérea Dominicana y en dos torneos del Centro de Enseñanza. Todo ello y más, uno de los mejores recuerdos los tiene el equipo juvenil Sherwin Williams, en el campeonato de 1953, organizado y dirigido personalmente por el inmortal Tetelo Vargas. En aquellos tiempos, aún tiene presente los duelos de lanzadores con el también jugador Jaime Goicochea, residente hoy en el batey Lechuga.
Pasado algunos años, Guillín se convirtió en uno de los mejores jardineros amateur de soft-ball e imitaba en sus fildeos a su ídolo y astro puertorriqueño Luis Rodríguez Olmos, recibiendo la pelota a la altura de la cintura.
Acaba de regresar Guillín de un placentero viaje por Alburquerque, Nuevo México, donde fue a visitar a su hijo el médico dominicano Miguel Enrique Pellerano Heureaux y esposa, también dominicana, doctora Dania de Pellerano, odontóloga. Allá pasó nuestro personaje una placentera jornada familiar, y aún añora aquel 1953, cuando el narrador de la HIJ decía: «Lanza Guillín: ¡Strike!