Habitaciones, un mundo de fantasía para sus hijos

Habitaciones, un mundo de fantasía para sus hijos

Lo que aporta armonía al espacio es la coordinación de colores y formas. No  recargue la habitación con la misma ilustración de la ropa de cuna, las cortinas, la lámpara y la cinta

Es posible combinar elementos y colores  con el resto del equipamiento básico, para transformar la habitación de sus hijos en un sitio que transporte la imaginación de todo aquél que entre a  ella.

Cuando se piensa en el cuarto del futuro bebé, la primera imagen que llega a la mente es la de una habitación pintada a dos tonos, separados por una cinta de papel tapiz estampada. Sin embargo, hay muchas otras opciones de las que usted puede auxiliarse fácilmente para crear un ambiente mágico en el cuarto de sus hijos, sean éstos recién nacidos o más grandecitos.

Es aconsejable que tome nota de algunos de estos consejos útiles para que así pueda lograr la transformación de una simple habitación en todo un mundo de fantasía para sus hijos.

Para  una niña

Lo que aporta armonía al espacio es la coordinación de colores y formas. No cometa el error de recargar la habitación con la misma ilustración repetida en la ropa de cuna, las cortinas, la lámpara, la cinta de la pared. La opción  más ideal consiste en ambientar con dibujos que si bien pertenecen al mismo tema, no constituyan la única imagen.

Por ejemplo, puede recrear un jardín mezclando estampados florales con ilustraciones de algunos insectos tales como mariposas,  abejas, etcétera. El truco es poner esos acentos mágicos con el equipamiento necesario, el cual puede consistir en repisas, tiradores y percheros, en lugar de recurrir a los adornitos sin utilidad. Recuerde que la clave de una decoración exitosa se encuentra en los pequeños detalles.

Los colores y dibujos

Lo primero que debe hacerse es definir qué tipo de ambiente se desea: puede ser alegre y estimulante, con mucho colorido,  tranquilo y relajante, con tonos suaves. Cualquier opción es válida.

A la hora de escoger un motivo, tenga en consideración que lo disfrutará al menos durante dos años. Si no se ha decidido todavía, dé una vuelta por las tiendas y estudie las opciones del mercado. Evite los personajes de películas y dibujos animados pues los niños tienden a cambiar sus gustos y preferencias muy rápidamente e inclínese por temas como el mar, el espacio sideral, algún deporte o los vaqueros.

Cuarto de los pequeños

La pintura es lo más económico. Actualmente existen líneas de bajo olor, recomendables para pintar el cuarto del bebé. Las de un acabado satinado son lavables y agradables al tacto y se pueden preparar según una variada carta de colores. Para destacar la lencería, escoja el color que menos aparezca en el estampado y utilícelo en las paredes en cualquiera de sus degradaciones. Si hace lo contrario y utiliza el color predominante va a homogeneizar el espacio.

Un buen tapiz

El papel tapiz se consigue en cientos de diseños, aunque es un poco costoso y necesita de un profesional para su instalación. Si escoge uno muy llamativo inclínese por una lencería en colores sólidos o pequeños estampados geométricos, para no recargar la habitación.

Los murales son la última tendencia y constituyen la opción más personalizada. Puede pintar todas o algunas de las paredes utilizando como punto de partida imágenes de la lencería, algún juguete de valor sentimental o simplemente un tema de su elección. Lo más interesante de todas estas opciones es que pueden combinarse entre sí para lograr diferentes sensaciones y ayudar a corregir las deficiencias del espacio.

Con una habitación

Si el bebé va a compartir la habitación con un hermano de diferente sexo recurra a temas “neutros” como animales, juguetes, paisajes marinos. Sin son del mismo sexo, pero de diferentes edades, hay que procurar seleccionar un motivo que le guste a ambos. Escoja la lencería para la cama y la cuna con un mismo estampado y en tonos diferentes para cada una. Puede tratarse de algún dibujo geométrico como rayas, cuadros o lunares. No tenga miedo de combinar cada uno de los elementos.

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