Sesión Hablan los Alcaldes del periódico Hoy, con el licenciado en derecho José Thomás Díaz Alcalde del Municipio de Imbert provincia de Puerto Plata, durante una visita a la redacción. Hoy/ Napoleón Marte 13/12/2019
La falta de terminación de un muro de contención amenaza vidas de más de 500 familias en Yagüita y La Pangola
Imbert, un municipio olvidado: no llega ni asfalto
Al asumir la Alcaldía del municipio de Imbert, en la provincia de Puerto Plata, en el norte de República Dominicana, el 16 de agosto de 2016, José Tomás Díaz solo encontró deudas, ya que ni siquiera había una pala manual para retirar la basura de las calles.
Los equipos que existían eran prestados y dos camiones rentados, por lo que las primeras semanas fueron muy difíciles, ya que no había forma de ofrecer un buen servicio a la comunidad que estrenaba un nuevo gobierno local.
A los tres meses de haber llegado a la Alcaldía compró tres camiones nuevos y un compactador que estaba abandonado fue reparado y puesto al servicio de la recolección de los residuos sólidos.
Además, adquirió tres “moto carretas” que penetran a lugares donde los camiones no pueden, con lo que desarrollan una labor más eficiente en el servicio.
“Podríamos decir que uno de los municipios más limpios que tiene la provincia de Puerto Plata es el de Imbert”, asegura.
Díaz expresa que no tiene problemas con el destino final de los residuos sólidos, como el que confronta su vecino de Puerto Plata, debido a que el vertedero funciona en unos terrenos que donó el Consejo Estatal del Azúcar (CEA). Allí depositan tres municipios, el de Guananico, el de Altamira y el de Imbert, pero aunque el programa Dominicana Limpia (DL) prometió mejorar el lugar, “a más de un año nada ha hecho al respecto”.
Entre las ayudas requeridas figuran maquinarias para ofrecer mantenimiento al vertedero, como pala, buldozer y otros, ya que los existentes son equipos obsoletos donados durante la gestión del presidente Hipólito Mejía, en el período 2000-2004.
Otra dificultad es la presencia de los denominados buzos que tras la búsqueda de metales provocan incendios de manera constante, aunque en los últimos cinco meses los siniestros han desaparecido.
Municipio olvidado. Para el alcalde Díaz, Imbert ha sido un municipio olvidado por el Gobierno, ya que ni siquiera el programa de asfaltado llega a esa localidad, a pesar de los esfuerzos para hacerlo una realidad.
Sospecha que Imbert ha sido excluido de ese programa por el hecho de que el alcalde pertenece al Partido Revolucionario Moderno (PRM), opuesto al partido de Gobierno.
“Entiendo que esa es la causa de la exclusión, bloqueado por personas del mismo municipio y de la provincia, porque no creo que sea una práctica del presidente Danilo Medina”, expone.
Cuestiona que aun el presidente Medina dispusiera de una partida de RD$5 millones de pesos para la construcción de aceras y contenes, hace casi nueves meses que no llega el asfalto a la comunidad.
Señala que la mayoría de las calles están intransitables y el ayuntamiento no dispone de los recursos para comprar ese material.
El cabildo apenas recibe 3.6 millones de pesos, de los cuales hay que sacar buena parte para pagar los camiones que fueron adquiridos para ser completamente pagados en el período de gobierno municipal que cesa el próximo año.
Otras deudas que deben saldarse son las contraídas para la construcción del mercado, por lo que paga RD$550 mil todos los meses; de combustibles casi RD$300 mil, por lo que queda prácticamente nada para inversión, personal y ayuda social.
Lamenta que el mandatario no cuente con nadie en la provincia que lo represente y haga saber de las preocupaciones y necesidades de la comunidad.
En el municipio falta también un matadero que garantice la salud de los munícipes, ya que el actual data de más de 50 años, ubicado a orilla del río Bajabonico, por lo que se requiere de una estructura en las afueras.
Tierra de nadie. Llama la atención sobre “el pillaje a que están siendo sometidas miles de tareas de tierra del Consejo Estatal del Azúcar (CEA) por personas que luego las venden como si fueran de su propiedad, sin que nadie intervenga”.
La práctica, sostiene Díaz, podría dejar en pocos tiempo al municipio sin ese patrimonio que antes del proceso de privatización eran sembradas de caña para la azúcar.
Díaz dice que durante la visita que hizo al Palacio Nacional junto a otros alcaldes de la provincia alertó al presidente Medina sobre la situación, para que convirtiera los terrenos en parcelas y las entregara a los campesinos para ponerla a producir. Díaz asegura que el presidente Medina se comprometió a realizar una visita a la localidad, pero nueve meses después no se ha producido y las ocupaciones continúan.
“Estamos hablando de más de 20 mil tareas con vocación agrícola y que también una buena parte se puede utilizar para la crianza de ganado”, precisa.
Uno de los retos del municipio es su ordenamiento territorial, ya que se han construido sectores sin ninguna regulación. Afirma que hay sectores que requieren el apoyo del Gobierno, como el sector de La Yagüita, La Pangola, y otros lugares donde, cuando llueve, hay que desalojar más de 500 familias, porque el río entra a las zonas habitadas debido a que hay unos gaviones que no se han terminado de construir.
Recuerda que expresó al presidente Medina que fijara la atención en eso.
Salud y educación. Alerta a las autoridades de Salud Pública sobre un brote de dengue en el municipio, sin que se observe ningún interés por atacar el mosquito que lo produce.
Indica que en varias comunidades decenas de personas, mayoría niños, padecen del mal, por lo que urge que Salud Pública intervenga con una campaña masiva de educación y control. Cita un politécnico que las autoridades empezaron a construir hace cinco años y está paralizado, a pesar de que la obra física está en alrededor de un 90%.
Asimismo ocurre con un plantel en la comunidad Saballo, sin que una explicación que convenza a los moradores del lugar, ya que hay contradicciones entre las autoridades provinciales y los ingenieros a cargo de la obra.
Atractivos. Además de los 27 charcos de Damajagua, Imbert tiene otras zonas donde los turistas hacen mucha aventura en los jeeps safaris.
Díaz califica los 27 charcos de Damajagua como el principal atractivo ecoturístico y lo considera un modelo por la forma como se administra, ya que existe un consejo de comanejo, del que forma parte el cabildo, los ministerios de Turismo y Medio Ambiente, entre otras entidades.