Hay problemas que quedan invisibilizados en la opinión pública, opacados, tal vez, por los constantes temas políticos-partidarios.
Uno de ellos es el bajo índice de lactancia materna que hay en el país. Datos de Unicef indican que mientras el promedio de la región oscila entre 25% y 40% (es mayor en Bolivia (60%), Perú (67%) y Chile (82%), en República Dominicana el panorama no es halagüeño: menos del 5%.
Por eso, aprovechando la reciente celebración de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, es importante revalorizarla. Los estudios señalan sus beneficios: inmuniza (el calostro), mejora la nutrición, previene la mortalidad infantil, disminuye el riesgo de enfermedades no transmisibles en madres y en bebés, y apoya el desarrollo cognitivo.
Además, en el orden socio-económico, la lactancia materna incide en la reducción de la pobreza, reduce el presupuesto familiar y las desigualdades.
Si eso es así, ¿Por qué entonces el índice de lactancia materna es tan bajo en nuestro país? Desde mi perspectiva hay dos factores básicos: mucha desinformación. Abundan los mitos y cuentos de camino. Que hay mujeres que no producen leche, que no llena, que no es suficiente, que hay que complementar con fórmulas (leches artificiales).
La realidad es que la leche del seno puede ser la fuente de alimentación exclusiva del bebé durante los primeros seis meses de vida, pero, para lograr la producción adecuada, un error fatal es complementar porque, mientras más succión más producción.
La otra razón es el negocio alrededor de esta industria. Los intereses comerciales de algunos laboratorios y empresas productoras de leche artificial y comida para bebés que promueven su consumo y a veces hacen alianzas con algunos médicos que ante la mínima dificultad prescriben formula.
Esto vulnera derechos fundamentales. Es un tema de salud pública, y al trabajarlo se abarca la salud preventiva. ¿Cómo lograrlo? Las mujeres solas no podemos. Necesitamos contar con una red de apoyo (pareja, familia, amigos).
El Estado también debe jugar su rol. Salud Pública y la Comisión Nacional de Lactancia deben ser más proactivos con este tema. Vigilar que clínicas y hospitales sean amigos de la lactancia.
Igualmente las empresas públicas y privadas deben jugar su rol. Dar los permisos para las extracciones, crear salas de lactancia (felicidades a las que ya la tienen) y cumplir con el subsidio.
Para concluir, invitarles a que vayan a Galería 360 a la exposición Lactancia al Natural que retrata 32 escenas de cómo mujeres lactan en la vida real. Es una iniciativa de Prolactar RD y las fotos son de Ruth Galla.
Vayan y defiendan esta causa de la lactancia materna. Así lograremos tener dominicanos más sanos y esto también ayuda a que tengamos un mejor país.