La abrumadora ventaja de Leonel Fernández, candidato a la Presidencia de la República por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), sobre sus oponentes Hipólito Mejía y Eduardo Estrella ha impulsado a los estrategas tanto del Proyecto Presidencial Hipólito Mejía (PPH) como del Partido Reformista Social Cristiano a tratar de despertar entre sus seguidores la esperanza de una segunda vuelta electoral y de hacerles creer que de celebrarse ésta el candidato reeleccionista o el del Partido reformista podría resultar triunfador en los comicios programados a celebrarse el 16 de mayo próximo.

Según los resultados de la encuesta realizada por la firma costarricense Consultoría Interdisciplinaria en Desarrollo (CID) del 23 al 31 de marzo próximo pasado, Leonel Fernández alcanzaría un 55% de los votos efectivos (que son los que se cuentan) mientras Hipólito Mejía obtendría 26% y Eduardo Estrella el 19%. Esas inferencias también señalan que el 61% de los potenciales votantes nunca votaría por el candidato reeleccionista, y que el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) es la agrupación política con más simpatizantes (49%).

Los detalles y pormenores de ese escrutinio fueron publicados en el periódico «HOY» en su edición correspondiente al 15 de abril próximo pasado.

Los resultados de la encuesta Gallup, realizada del 14 al 18 de abril en curso, indicaron que Leonel Fernández obtendría en las elecciones programadas a celebrarse el 16 de mayo próximo un 54.8% de los votos. En segundo lugar quedaría Hipólito Mejía con un 27.1 % y, detrás de ambos, Eduardo Estrella con el 14% de las preferencias de los potenciales votantes. Esas inferencias señalan que el nivel de rechazo de Hipólito Mejía se eleva a un 60.6% y que el Partido de la Liberación Dominicana sigue siendo el preferido de la población (51.0%).

Esos y otros detalles de esa encuesta fueron publicados en un suplemento especial del periódico «Diario Libre» en su edición correspondiente al 21 de abril próximo pasado concerniente al porcentaje de potenciales votantes a favor de la candidatura de Leonel Fernández: 55% CID: y 54.8% Gallup.

Las pequeñas diferencias observadas en ambos casos pueden ser atribuidas a las fluctuaciones del muestreo.

Esto ocurrió a pesar de que mediaron más de 15 días entre la realización de una y otra encuesta, lo que puede entenderse que tanto Leonel Fernández como Hipólito Mejía han alcanzado, o están a punto de alcanzar, el tope de porcentaje que les es dado alcanzar.

Faltando menos de un mes para la celebración de las elecciones, no han aflorado elementos significativos que muevan a pensar un cambio en la preferencia de los potenciales electores.

Por demás, los resultados de las encuestas indican que, independientemente de quien sea su contrincante en una posible segunda vuelta electoral, Leonel Fernández ganaría con un amplísimo margen de votos.

En la primera vuelta electoral de las elecciones de 1996, José Francisco Peña Gómez obtuvo 1 millón, 192 mil, 211 votos (41%); Leonel Fernández 1 millón, 130 mil, 523 votos (39%); y Jacinto Peynado, 435 mil, 504 votos (15%). Tal y como señalaban los resultados de las encuestas, fue necesario la celebración de una segunda vuelta.

La diferencia en el número de votos en la primera vuelta entre Peña Gómez y Leonel Fernández fue de apenas de 2 puntos porcentuales a favor del primero.

¿Cómo, faltando menos de un mes para la celebración de las elecciones de mayo, Hipólito Mejía va a descontar la ventaja de más de 27 puntos porcentuales que le lleva Leonel Fernández?

¿Hacia dónde puede crecer la candidatura de Hipólito Mejía de un nivel de rechazo de un 60% y en medio de un porcentaje de indecisos de apenas un 2.7%?

En la segunda vuelta electoral de las elecciones de 1996, Leonel Fernández obtuvo 1 millón, 466 mil, 384 votos (51.3%) y, José Francisco Peña Gómez 1 millón, 394 mil, 641 votos (48.7%).

Para entonces existían dos grandes líderes políticos: José Francisco Peña Gómez y Joaquín Balaguer.

En la segunda vuelta electoral, Joaquín Balaguer guió a las masas reformistas a votar por Leonel Fernández, candidato del Partido de la Liberación Dominicana.

Hoy, en este país no existe un dirigente político con capacidad para guiar a la militancia de su partido a votar por un determinado candidato, mucho menos cuando se trate de uno ajeno a su organización.

Faltando trece días para la celebración de las elecciones del 2000, en las que resultó triunfador Hipólito Mejía, candidato a la Presidencia de la República por el Partido Revolucionario Dominicano, los resultados de la encuesta de la firma española Demoscopia colocaban a Hipólito Mejía en el primer lugar de la preferencia de los electores con un 44.0%, seguido de Danilo Medina con un 33.2% y Joaquín Balaguer con un 22.0%. Para entonces, la diferencia entre Hipólito Mejía y Danilo Medina era de 10.8 puntos porcentuales.

Hoy, estamos hablando de una diferencia entre Leonel Fernández e Hipólito Mejía de más de 27 puntos porcentuales.

El candidato Hipólito Mejía no ha alcanzado el nivel de preferencia de más de un 30% alcanzado por Danilo Medina en las elecciones del 2000, y se duda que podrá hacerlo.

Hipólito Mejía, candidato presidencial del PRD en las elecciones del año 2000, prometía hacer una gestión de gobierno «frugal en el gasto, austera en el consumo y eficiente en la inversión».

Hoy, si algo caracteriza la gestión del presidente Mejía es la ineficiencia y el dispendio. De ahí el bajo nivel de aceptación y la alta tasa de rechazo del mandatario y candidato reeleccionista.