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El diputado Pelegrín Castillo, de la Fuerza Nacional Progresista, hizo una propuesta de control de gasto público y depuración de la deuda pública, la cual, entre otras medidas, plantea concentrar las compras gubernamentales en varias centrales de compra, para generar economías del orden de entre 30 y 40 por ciento.
La propuesta del diputado Castillo advierte que en la actualidad, el sector público efectúa sus compras con un alto grado de dispersión, a través de más de 70 departamentos de compra.
Considero que esto disminuye el poder de compra del Estado en la adquisición de bienes y servicios, la cual realiza, además, con poca transparencia y gran discrecionalidad.
Recomendó que la medida propuesta debe complementarse con la realización de licitaciones públicas, controles de inventario y otras medidas similares.
Consideró que, además de las compras generales, deben unificarse las compras de medicamentos, servicios informáticos, seguro y defensa.
La propuesta hecha por Castillo, en nombre de la Fuerza Nacional Progresista, también plantea integrar una comisión, con personas de gran credibilidad pública, para la revisión y renegociación de la deuda interna del Estado con proveedores, contratistas y bancos, la cual ha sido estimada en más de 20 mil millones de pesos.
Esta comisión tendría el cometido de producir economías del orden del 30 ó 40 por ciento de esas deudas, meta que, a su juicio, seria fácil de alcanzar si se toma en cuenta que «en la presente transición se están produciendo acuerdos de transacción por hasta el 60 por ciento del valor de las acreencias».
«Esta medida debe venir acompañada de fuertes restricciones en el endeudamiento de las entidades descentralizadas del Estado».
Castillo también propone votar una ley de responsabilidad fiscal, que fije topes al endeudamiento en proporción al presupuesto de cada institución y esté obligada a fijar las deudas pendientes en la ley de gastos públicos del año entrante, así como establecer sanciones ejemplares a las violaciones en estos aspectos.
También sugiere revisar y reajustar los términos de comercialización de hidrocarburos, tanto en los mercados internos como en internacionales, con lo cual se lograrían significativos recortes en el gasto público.
Asimismo, recomienda impulsar un proceso de reestructuración de distintas secretarías y organizaciones publicas, que incluya refundir aquellas instituciones que desempeñen funciones similares o compatibles.
Particularmente, sugiere crear la Secretaría de Estado de la Familia, a partir de la refundición de las secretarías de Estado de la Juventud y de la Mujer, así como convertir dos secretarías existentes en la Secretaria de Educación superior, cultura, Ciencia y Tecnología. También consideró que se pueden eliminar el Departamento Aeroportuario y varias instituciones del sector agropecuario que están dedicadas a los mismos fines.
También propone un sustancial recorte de gastos personales de los altos cargos de la administración, así como reducir la nómina del Estado, depurar e informatizar el sistema de pensiones en el sector público, así como suspender por tres años la creación de nuevas demarcaciones político-administrativa.
También propone que todos los edificios públicos y redes de alumbrado eléctrico cuenten con bombillos de bajo consumo y larga duración, y programas dispositivos de ahorro de energía.
Además, plantea que la inversión pública debe hacer énfasis en un plan de reconstrucción y mantenimiento de la infraestructura nacional, en especial de la red vial, durante los primeros dos años el próximo período de gobierno.
Por último, recomienda una rigurosa investigación acerca de los préstamos del Estado concertados con la banca extranjera, pública y privada, a fin de indagar no sólo los términos y condiciones en que fueron pactados, sino también su ejecución real.
