Una experiencia única, tenebrosa e inédita llevó al Gobierno dominicano, presidido por el entonces presidente constitucional Danilo Medina Sánchez a cerrar el país, el 19 de marzo del año 2020.

El cierre del país se produjo cuando se habían registrado 21 contagios y una defunción. Los datos de muertes y cierre de otros países llegaban a través de los más diversos medios de comunicación y redes.

El día que el país fue cerrado, a causa del aumento de los contagios de covid-19, se produjo un estremecimiento económico y emocional. En materia económica un futuro incierto se esparció entre empleadores que no pudieron mantener sus medianas y pequeñas empresas abiertas, lo que significó un golpe mortal para los que se quedaron sin empleo.

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Inicio confinamiento

Aunque el Gobierno de entonces inició un plan de asistencia para los que perdieron su empleo, y para las empresas que seguían abiertas y sus empleados, el impacto en la economía ya era fuerte, sobre todo porque el principal motor de la economía, el turismo, tuvo que apagarse.

Cambio de vida

Era obligatorio el uso de mascarillas para asistir a centros de salud, bancos, supermercados, salones de belleza y a casi todos los lugares en donde se reunían más de 10 personas.

Durante las primeras semanas de marzo, la gente estaba con guantes en las manos, unos días después la Organización Mundial de la Salud descontinuó la recomendación.

El miedo se apoderaba de la gente, las filas se hacían interminables en supermercados, farmacias, bancos comerciales y emergencias. Algunos productos como el papel de baño, los antigripales, guantes, mascarillas y las leches se terminaban con rapidez en el mercado. La sabiduría popular comenzó a buscar cúrcuma y jenjibre en los mercados, para calentar la garganta ante cualquier amenaza del SARS-CoV-2

Impacto emocional

El confinamiento en las casas, después de las 3:00 de la tarde, era obligatorio, la circulación de vehículos limitada también, lo cual tuvo repercusiones psicológicas en una población no acostumbrada al encierro.

Recluir a la gente en sus casas resultó difícil, por la resistencia de muchos a permanecer enclaustrados, esto se complicaba más los fines de semana.

De ahí surgió el denominado Teteo, un baile y fiesta clandestina que se popularizó en barrios, y en fiestas privadas en sitios exclusivos. Poco a poco se fueron agotando las camas de las unidades de cuidados intensivos, ciudades como San Francisco de Macorís fue sometida a un cerco epidemiológico.

Asimismo, ordenó la suspensión por quince días de todas las actividades comerciales, con excepción de supermercados, colmados, gasolineras, farmacias, así como todos los eventos culturales, artísticos y deportivos.

En la Administración Pública, los empleados de más de 60 años o con condiciones especiales de salud permanecieron en sus hogares y las empresas privadas facilitaron el teletrabajo.

La docencia en todos los niveles educativos, del básico al universitario, fueron suspendidas. Se prohibieron los actos proselitistas multitudinarios de cara a las elecciones presidenciales y legislativas del 2020.

Se tomaron medidas económicas para paliar el efecto de las restricciones en las empresas privadas y para garantizar los empleos.

Se dejó de aplicar la tasa de Acuerdos de Precios por Anticipado (APA) que se aplicaba al sector hotelero.

El Banco Central anunció en varias ocasiones paquete de medidas orientadas a garantizar la estabilidad económica y la provisión de liquidez para las empresas del país. Estuvo activo el entonces ministro de la presidencia Gustavo Montalvo y quien fuera al momento la vicepresidenta de la República, doctora Margarita Cedeño.

Personalidades

Aunque Sánchez Cárdenas estaba al frente del Ministerio de Salud, varias personalidades conformaban una comisión de alto nivel. La coordinaba el ministro Montalvo y la dirigía el entonces director ejecutivo de la entidad doctor Amado Alejandro Báez.

Estuvo amparada en el decreto 141-20 de fecha 1 de abril del año 2020. Formaban parte de la comisión los doctores, Jorge Marte, José Rafael Yunén, Chanel Rosa, Patricia León, el entonces ministro y el general Juan Manuel Méndez García.

El Gobierno implementó diversos programas sociales para evitar el colapso económico.

Solidaridad y entrega

La solidaridad se puso de manifiesto en medio de la pandemia, decenas de historias de personal médico que sacrificaban todo por salvar vidas fueron contadas en los medios de comunicación. La gente hacía donativos de comida, pero el dolor era inmenso.