Hoy 
POR JOSE CACERES
Promoviendo el lema «Dar es mejor que recibir», ejecutivos de la Ferretería Americana realizaron ayer una donación de 50 mil pesos a cinco ex glorias del béisbol dominicano, en un acto que contó con la presencia del Juan Marichal, único criollo en el Salón de la Fama de Cooperstown, Mario Soto y César Gerónimo.
El veterano comentarista deportivo, Mickey Mena, leyó la semblanza de los ex-peloteros Garabato Saskie, Pedro Hernández, Alberto Lois y Luis- Grillo C- Báez. Se excusó Federico Velázquez.
David Paiewonsky, vicepresidente de ventas y mercadeo, afirmó que la entidad con ese bonito programa, ha venido realizando donaciones a instituciones sin fines de lucro, así como a personas necesitadas.
Niños, jóvenes y adultos compartieron con los invitados y muchos se fueron con bolas fue fueron autografiadas por Juan Marichal, Mario Soto, César Gerónimo, Pedro Hernández, Garabato Saskie, Alberto Lois y Luis Báez.
«Los agraciados son Luis- Grillo C- Báez, Pedro Hernández, Alberto Lois, Garabato Saskie y Federico Velázquez», dijo el ejecutivo. Cada uno de ellos recibió 10 mil pesos. La coordinación tuvo a cargo de Juan José Rodríguez, de JJ, Sport.
HABLA MARICHAL
Juan Marichal, inmortal de Cooperstown, declaró que esa iniciativa de Ferretería Americana debería ser imitada por otras casas comerciales, ya que ciertamente, muchos peloteros de la época romántica no están bien económicamente y ameritan que se vaya en su auxilio.
«Esta iniciativa es muy plausible», puntualizó el ex-lanzador de los Gigantes de San Francisco.
HABLA MARIO SOTO
En iguales términos, se pronunció el ex-tirador de los Rojos de Cincinnati, Mario Soto, actual presidente de la Federación Nacional de Peloteros Profesionales.
«Nosotros valoramos este gesto, ya que muchos de nuestros socios no ganaron el dinero que hoy, gracias a Dios, obtienen Sammy Sosa, Pedro Martínez, Alex Rodríguez, por mencionar algunos», dijo Mario.
CÉSAR GERÓNIMO
El ex-jardinero de los Rojos de Cincinnati y los Tigres del Licey, César Gerónimo, manifestó que estaba orgulloso de compartir un momento con grandes figuras del béisbol, que algunos de ellos, fueron sus consejeros y mentores.
«Cuando llegué al Licey en el l967 encontré mucha gente buena que me daba mucho consejo y eso hoy lo agradezco», precisó Cesarín.
Pidió a los jóvenes que no descuiden sus estudios, que hagan una carrera profesional y si tienen suerte y pueden jugar pelota que lo hagan, pero nunca dejando de estudiar.
