Washington. AP. En lo que representa una innovación médica, un grupo de médicos utilizó partículas de plástico y una impresora láser de tercera dimensión para crear una tráquea y poder salvar la vida de un niño que solía dejar de respirar casi a diario.
Es el más reciente avance del creciente campo de medicina regenerativa: crear partes del cuerpo en el laboratorio.
En el caso de Kaiba Gionfriddo, los médicos no podían perder ni un segundo. Debido a un defecto congénito, la tráquea del bebé de Ohio no dejaba de colapsarse, haciendo que su respiración se detuviera.