¡Hagamos la otra América grande también!

¡Hagamos la otra América grande también!

Pedro René Almonte Mejía.

Fue el 8 de Noviembre del pasado año cuando se celebraron las elecciones de los Estados Unidos ; fueron a la contienda electoral varios candidatos , pero los dos hegemónicos : Partido Republicano y el Partido Demócrata presentaron a Donald Trump y Hillary Clinton, esta última “venció” a Bernie Sanders en unas muy cuestionadas primarias . Donald Trump fue el vencedor en estas elecciones tras obtener 304 votos electorales, frente a los 227 de Clinton; no así en el voto popular, puesto que Clinton superó a Trump por aproximadamente 3 millones de votos (casi la mitad del padrón electoral de la República Dominicana).

El 20 de Enero 2017, el día esperado; Trump es juramentado como el Presidente No. 45 de los Estados Unidos, y entonces comenzó todo a cambiar; el Presidente recién instalado en la casa blanca empieza a firmar decretos y órdenes administrativas, apegado a sus promesas de campaña y sin titubeo alguno.

Donald Trump llegó duro y “curvero” , se estrenó con la derogación del “Obamacare” la emblemática ley de salud de su predecesor Barack Obama ; se sacó debajo de la manga un día del patriotismo ; anunció la renegociación del tratado de libre comercio de América del Norte (TLCAN) ; firmó la salida del tratado transpacífico de cooperación económica (TPP); firmó el decreto donde formaliza la construcción del muro en la frontera Estados Unidos – México ; y ya lo más reciente como si todo esto fuera poco para los 10 días que tiene en el salón Oval ; prohíbe la entrada de ciudadanos de países en “conflicto” , yo los he bautizado como los 7P : Irán , Irak , Siria , Sudan , Libia , Yemen y Somalia .

Tal parece y sus hechos lo demuestran,  que el hombre (Trump) quiere que “América vuelva a ser grande otra vez” , SU América NO la nuestra, y esto aunque así tenga que llevarse al mundo por delante, porque lo importante es SU América, NO la nuestra, la que habla español, la América mestiza. Nunca como hoy, el momento fue más oportuno para que nos dejemos de reuniones, nos dejemos de retórica vacía y trabajemos juntos por la gran coalición latinoamericana, donde seamos nosotros los arquitectos de nuestro destino.

¡Hagamos la otra América Grande También!