En el municipio de Haina, en la provincia San Cristóbal, está instalado un parque industrial que aporta el 25% del Producto Interno Bruto (PIB) del país, pero este no recibe prácticamente nada a cambio por parte del Gobierno, y los empresarios se las ingenian para no pagar todos los arbitrios que les corresponden.
Así se expresa el alcalde Osvaldo Rodríguez, quien considera que da pena que ese municipio se venda como el que más aporta a la economía, pero no obtiene ningún beneficio, sino que por el contrario “estamos llenos de calamidades”.
El funcionario estima que el Gobierno debería tener a Haina como “una tacita de oro”, pero esa localidad no cuenta con una obra gubernamental que la población se sienta orgullosa.

Es tanto el descuido gubernamental, dice, que Haina carece de agua potable suficiente, porque el acueducto que tiene fue construido en 1958 para 20,000 personas, pero hoy superan los 180,000. Tampoco cuenta con un hospital a la altura de las exigencias de la zona.
En términos de saneamiento el panorama también es desolador, lo cual se expresa en un solo ejemplo: en el barrio Los Cangrejos, donde residen más de mil familias, las viviendas carecen de inodoros, por lo que las heces fecales se depositan en letrinas o en el lecho del río Haina.
Sobre las intervenciones del Gobierno central Rodríguez señala que las últimas grandes obras desarrolladas en el lugar fueron la construcción de un pequeño mercado, en el último período del expresidente Leonel Fernández, y un polideportivo en el cuatrienio del expresidente Hipólito Mejía.

En cuanto a la responsabilidad empresarial el alcalde expresó que “son tan tacaños y duros los empresarios que cuando van a solicitar permiso de construcción llevan un certificado de que pertenecen al parque de zona franca, aunque se sabe que son industrias y lo hacen para no pagar nada”.

Asimismo señala que las empresas de zona franca apenas pagan RD$30,000 mensuales por el servicio de la basura, mientras que la zona industrial solo RD$60,000, a pesar de que este último grupo cuenta con más de 100 empresas.

Y en cuanto a la generación de empleos, el alcalde afirma que no son los haineros los que más se benefician porque los empresarios dicen que en la localidad no hay mano de obra calificada, pero tampoco colaboran para cambiar esa realidad.
Contaminación. Al vertedero de Haina, con un territorio de alrededor de 500 mil metros cuadrados, van todos los residuos sin importar que sean químicos, de origen hospitalario o de cualquier índole, lo que representa un peligro para la comunidad y los buzos que se ganan la vida recogiendo desechos.
Rodríguez deploró que los ministerios de Salud Pública y Medio Ambiente están ajenos a esa grave problemática.
Para Rodríguez Medio Ambiente no trabaja y está nulo en Haina, ya que nunca se ha acercado a la alcaldía con miras a diseñar un plan para disminuir la contaminación.

Sin equipos. El alcalde también deplora que Haina, siendo la principal zona industrial del país, no cuente con un cuerpo de bomberos que responda adecuadamente en caso de un incendio de gran magnitud, como ha ocurrido, sin necesidad de pedir auxilio a otras ciudades como el Distrito Nacional.

La más reciente adquisición es una unidad del Sistema de Emergencia 911, y otros camiones antiguos que apenas resuelven conatos menores.
Exhibe obras. El alcalde Rodríguez hace magia con los RD$11.2 millones que recibe al mes como asignación del Poder Ejecutivo.
De hecho, el cabildo ya asfaltó 3,500 metros de calles, en 23 sectores de un total de 48 que existen en el municipio, por lo que confían en que el Ministerio de Obras Públicas continúe facilitando el material para poder cumplir con la demanda de la población.
Rodríguez explica que a pesar de que Obras Públicas otorgó el asfalto, el cabildo tuvo la responsabilidad de aplicarlo previa preparación del terreno, lo que conllevó una inversión de RD$3.6 millones.

Una de las obras que más destaca el alcalde Rodríguez es la construcción de un puente y encache de la cañada en la Curva Cristo Viene, con una inversión de RD$4,669,855.83.

Asimismo, tiene programada para las próximas semana la inauguración de la funeraria municipal con una inversión de RD$6,658,722.53, en una primera etapa que correspondió a la gestión anterior y que solo dejó una deuda por ese monto.

Para la segunda etapa que conlleva muebles de la capilla, climatización y electrificación, el cabildo invierte la suma de RD$2,032,892.76.

El cabildo compró una casa en Piedra Blanca, por un monto de RD$700,000, para demolerla y construir una calle de acceso en el sector Flamboyán.

También compró otra casa en el sector Villa Penca, pero por un valor RD$950,000, con la finalidad de demolerla y construir una calle que conecta a otras y de esa manera facilitar el acceso de las personas que habitan en el lugar. Otra obra de gran impacto para los munícipes ha sido la pavimentación en hormigón armado, así como de badenes en la carretera Sánchez, con una inversión de RD$3,212,808.

De igual modo, pavimentación y bacheo de varias calles en diferentes sectores por un monto superior a los RD$5.4 millones.

También destaca la construcción de ocho casitas en Cabón, por un monto total de RD$1,495,022.79; así como otras obras este año.

El alcalde de Haina informó que para los próximo días convoca a las organizaciones comunitarias de Haina para elabora el Presupuesto Participativo.
Mayor logro. Rodríguez dijo que uno de sus mayores logros ha sido estabilizar la recolección y disposición final de los residuos sólidos, que era un dolor de cabeza para ese municipio.
Recuerda que los incendios constantes del vertedero y el incumplimiento de las compañías recolectoras mantenían a Haina arropada de basura, lo que corrigió a pocos meses de asumir la gestión en agosto de 2016.
Uno de los mayores desafíos para el gobierno local es el saneamiento de al menos 10 cañadas que cruzan por el municipio, para lo que urge la intervención del gobierno central debido a la gran inversión que conlleva.