Haití cumplió este viernes un año de la detección de los primeros casos de coronavirus en su territorio, con un balance de 12.714 contagios y 251 muertes confirmados en el país, cifras más benignas de lo esperado inicialmente.
La ministra de Salud, Marie Gréta Roy Clément, dijo en un comunicado que el país ha evitado “lo peor”, puesto que hace un año se vaticinaban cifras de contagios más elevadas dado lo visto en Europa.
Roy Clément advirtió, no obstante, de que “un año después, el virus sigue circulando en el país”, por lo que pidió a la población mantenerse vigilante, aunque las cifras de contagio sean bajas.
“Si a finales del año 2020 se observaba un aumento de nuevos casos, los nuevos datos epidemiológicos muestran un claro descenso de estos”, dijo la ministra de Salud.
El Ministerio destacó que el bajo número de contagios se explica, en parte, por la puesta en marcha de un plan de respuesta centrado principalmente en la vigilancia epidemiológica, marcada en particular por la búsqueda de casos y las pruebas sistemáticas de los casos de contacto.
También resalta el conjunto de medidas de vigilancia epidemiológica adoptadas en los puertos y aeropuertos, así como la declaración del estado de emergencia sanitaria y el cierre de algunos servicios no esenciales al comienzo de la pandemia.
“Estos esfuerzos combinados y la puesta en común de nuestros recursos nos han permitido evitar lo peor y reducir el número de enfermos y muertos”, afirmó Roy Clément.
Desde mediados del año pasado, las medidas de protección como lavado de mano, el uso de mascarillas y la distancia social, fueron olvidados por la población haitiana en los lugares públicos, tales como el transporte, mercados, escuelas o iglesias.
El Gobierno también ha promovido aglomeraciones, con la organización de fiestas multitudinarias con motivo del Carnaval nacional, celebrado el pasado febrero en la ciudad de Port-de-Paix, en el norte del país.