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MIAMI, Haití, país al que durante mucho tiempo se le asociaba con la pobreza desesperada, la inestabilidad política y la violencia sin control tiene ahora razones para ver un futuro mejor, comentaron dos funcionarios estadounidenses.
Velia De Pirro del Departamento de Estado y Paul Tuebner de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) explicaron en entrevistas por separado con el Servicio Noticioso desde Washington, durante la conferencia sobre la Cuenca del Caribe que tuvo lugar en Miami del 3 al 5 de diciembre, que la mejora económica en Haití está relacionada con la mayor seguridad que existe hoy en el país, especialmente en la capital Puerto Príncipe.
De Pirro, directora ce la Oficina de Asuntos del Caribe del Departamento de Estado, dijo que la misión de la ONU que se ha llevado a cabo durante el último año con el apoyo de la comunidad internacional ha limpiado de pandillas delictivas a Cité Soleil, una región paupérrima de Puerto Príncipe, y que ello ha marcado una gran diferencia en la capacidad de circulación de las personas en la capital y en su sensación de seguridad.
La mejor situación de seguridad es probablemente el cambio más significativo que hemos visto en Haití en el último año, dijo De Pirro.
Añadió que la mejora en el crecimiento económico del país ha resultado en más empleos e inversiones en Haití, y que Haití tendrá una tasa de crecimiento del 4,5 por ciento en el año fiscal 2007, con la misma proyección de crecimiento para el año 2008.
Todavía hay mucho trabajo que hacer en Haití, no lo negamos, pero ahora hay unos cimientos sobre los que seguir construyendo, declaró De Pirro.
Expresó que Estados Unidos contribuyó con 600 millones de dólares para Haití en el período de los años fiscales 2004 a 2006. Además, en el año fiscal 2007, Estados Unidos otorgó otros 200 millones de dólares de ayuda al país caribeño.
De Pirro comentó que por medio de la Ley de Oportunidad Haitiana a través del Aliento a la Asociación (HOPE) firmada por el presidente Bush en diciembre de 2006, se han creado alrededor de 5.000 empleos para los haitianos, y creemos que la medida funciona y continuará funcionando. La Ley HOPE otorga acceso preferente a las exportaciones haitianas a los mercados estadounidenses.
