A pesar de las continúas réplicas sísmicas que han seguido al devastador terremoto del 12 de enero, Haití parece recuperarse lentamente, sostenida en vilo por uno de los mayores esfuerzos humanitarios y de solidaridad internacional de los últimos tiempos. Pero la miseria se profundiza inexorablemente.

Al cumplirse dos meses de la tragedia, el suministro de medicinas y alimentos a más de tres millones de refugiados parece cumplirse a cabalidad, en tanto las vías de acceso son despejadas gradualmente en un descomunal trabajo de ingeniería cuya etapa crítica aún no empieza. Se estima en US14.0 billones de dólares el presupuesto para la reconstrucción física de Haití, según datos del BID.

Mientras se colectan esos recursos en un mundo afectado por la peor crisis financiera global de los últimos 80 años, las actuaciones y declaraciones de los protagonistas de la recuperación haitiana despiertan el optimismo.

Antes de partir a Washington el martes, el Presidente René Preval abogó por la disminución de la voluminosa ayuda alimentaria extranjera, restringiéndola a los más necesitados, para darle oportunidad al comercio y la producción nacionales, así como fomentar la iniciativa pública y privada haitianas.

Por otra parte, el Pentágono estadounidense ordenó para este fin de semana la reducción de las tropas que cumplen tareas de protección en Haití de 11,000 a 8,000 efectivos, al tiempo que el buque-hospital “USNS Comfort” zarpó de las costas haitianas luego de su misión humanitaria de siete semanas ayudando a víctimas del sismo, ahora que la infraestructura médica y los hospitales de campaña han sido rehabilitados.

Tras reunirse con Preval en Washington, la Secretaria de Estado Hillary Clinton pidió realizar elecciones legislativas “tan pronto sea apropiado”, y dijo que la votación es clave para la estabilidad y legitimidad del gobierno haitiano. Ella entiende que las elecciones retrasadas por el terremoto del 12 de enero, deberían ser una prioridad para asegurar la estabilidad y legitimidad del gobierno del Primer Ministro Jacques Bellerive.

El Presidente Preval salió optimista de la Casa Blanca el miércoles, luego de sostener una importante reunión con el Presidente Barack Obama, cuyo punto fundamental giró en torno al financiamiento internacional de la recuperación haitiana.

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