Los dos haitianos a los que la Policía Nacional responsabiliza de matar a José Joaquín Encarnación Montero, primer teniente de la institución, habrían ultimado al oficial porque supuestamente éste le cobró el alquiler de la casa donde residían los extranjeros, que era de su propiedad.
Sin embargo, otra versión de los motivos del incidente, da cuenta que el primer teniente les prestó dinero a los haitianos como «un favor de amigos», según lo que sospecha el coronel Mateo Encarnación, un primo del policía asesinado.
Por el momento, ninguna de las dos hipótesis sobre el origen del hecho no han sido confirmadas por las autoridades.
Los supuestos responsables de asesinar al oficial responden a nombre de Adrison Depetre y Tomy Tulise, quienes fueron arrestados este miércoles por miembros de la Dirección de Investigaciones Criminales de la Policía (Dicrim). No se ofreció detalles sobre la vida de los extranjeros.
Familiares del policía, hallado muerto el pasado martes en unos terrenos baldíos de la avenida Ecológica en Santo Domingo Este, contaron que el oficial le dijo a su esposa el pasado lunes a las 8:00 de la noche que iría a cobrar un dinero que le debían.
Mientras, el vocero de la uniformada, Diego Pesqueira, reiteró que las investigaciones sobre el caso continúan.
El oficial, oriundo de Las Matas de Farfán en la provincia San Juan, trabajaba como miembro de la seguridad del juez Anselmo Bello Ferreras, de la Tercera Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia.