POR TEUDDY A. SANCHEZ
PEDERNALES.- Haitianos impidieron ayer que sus compatriotas comercializaran sus productos en el mercado bilateral debido a una prohibición en la venta de arroz que mantienen las autoridades dominicanas en la frontera, atribuido a quejas de los dueños de factorías.

Los haitianos fueron vistos en el negocio vendiendo artículos del hogar, zapatos, ropas, víveres y otros de menor importancia, pero resentidos con las autoridades militares y aduanales que desde el lunes pasado no están permitiendo la venta de arroz por sacos, ni ajo.

Los síndicos de Pedernales, María Adalgisa Matos y Benjamín Permisión, de Anses-Pitre, se quejaron de la medida que prohíbe la venta de arroz, reconociendo que pequeños comerciantes de ambos lados no tienen otra alternativa para subsistir, debido a que el cereal que se produce en la República Dominicana no llega a la frontera, por la lejanía en que se encuentran.

Los ejecutivos municipales, apelaron al gobierno dominicano para que deje sin efecto las restricciones en la venta del arroz, que a su juicio es la alimentación de los pobres.

Indicaron que por la medida, el comercio bilateral pierde el interés de los ciudadanos, quienes visitan el negocio esperanzados de conseguir arroz para abaratar la canasta familiar y algunos comerciantes para venderlos en pequeños establecimientos.

La síndica de Pedernales dijo que con la medida de prohibir la venta de arroz, solo salen perjudicados los mas pobres, ya que el cereal, no puede ser adquirido en la frontera, dado a los costos de pasajes y a los elevados precios por libra, cuando el arroz traído desde Haití se vende mas barato.

Asimismo, el síndico de Anses-A-Pitre, Haití, Permisión, explicó que la mayor controversia que tiene el negocio dominico-haitianos, es que las autoridades se enfrascan en prohibir la venta de arroz, cuando muchos comerciantes de su país ya tienen decenas de sacos en almacenes, ocasionándole gran daños al producto, en medio de sacrificio económico.

Dijo que la comunidad haitiana está indignada y por ello no están permitiendo vender producto en los cubículos de la estructura del negocio ubicado en la división con ambos lados.

Llamó al gobierno dominicano para que ofrezca las facilidades en el negocio, donde solo salen beneficiadas las autoridades y el mayor número de personas pobres, quitándoles una gran presión a los gobiernos de la Isla.

El mercado bilateral, denominado La Puerta de la Confraternidad, fue creado por las autoridades dominicanas en coordinación con las haitianas para mejora la calidad de vida de ambos pueblos.