El 70% de las demandas que conoce el Tribunal de Trabajo del Distrito Nacional corresponde a haitianos, quienes en la mayoría de los casos se querellan contra empresas constructoras por alegados despidos injustificados, explicó ayer el juez presidente de esa corte, Jorge Reyes Lara. Hasta el viernes la cantidad de expedientes en las seis salas del Tribunal ascendía a 3,699.

El magistrado Reyes Lara aclaró que los casos se arbitran sin importar el estatus de legalidad de los demandantes, porque “el derecho de trabajo es un derecho fundamental y así lo reconocen la Constitución y el Código Laboral Dominicano. De hecho, este último explica que el mismo se establece con la protección del Estado”. El juez afirmó que un trabajador puede demandar sin importar si tiene pasaporte al día o si está acreditado en el país a alguna entidad. “Nuestra jurisdicción no cuestiona la legalidad de un empleado, solo se circunscribe a hacer valer sus derechos en materia laboral”, sostuvo.

Explicó que los haitianos, quienes en el 100% de los casos tienen sus abogados privados, demandan al maestro constructor, al ingeniero dueño de la empresa, al capataz, al ingeniero residente, a la empresa constructora y a todo el relacionado en la construcción que tenga rangos superiores o de mando; también incurren en el exceso de incluir en la querella hasta el nombre del proyecto donde trabajan. En la demanda por despido los haitianos reclaman las prestaciones laborales, los derechos adquiridos, pagos de salarios atrasados, además interponen una demanda adicional por daños y perjuicios por no inscripción en el seguro social.

Ganancia de causa. Reyes Lara, quien lleva dos meses como juez presidente y que desde 2007 ejerció como juez en la tercera sala del tribunal, resalta que los haitianos han obtenido ganancia de causa con sentencias que superan los RD$200 mil, dependiendo del tiempo laborado y del trabajo que hacían en la obra. Explicó que los sueldos de los haitianos oscilan entre RD$600 y RD$900 por día.