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NUEVA YORK. AP. Cuatro hombres capturados el año pasado en una operación encubierta del FBI fueron declarados culpables ayer de confabularse para hacer explotar sinagogas en Nueva York y derribar aviones militares con la ayuda de un informante. La operación ideada por el FBI nunca puso en riesgo a los habitantes de Nueva York, pero los acusados pensaron todo el tiempo que se trataba de bombas reales y misiles reales, dijo el vicefiscal federal David Raskin.
El jurado de una corte federal en Manhattan deliberó ocho horas antes de llegar a la conclusión de que el presunto autor intelectual, James Cromitie, y otros tres acusados son culpables de varios cargos, los cuales incluyen asociación delictuosa para usar armas de destrucción masiva y asociación ilícita para adquirir y usar misiles contra aeronaves con el fin de causar la muerte de efectivos y funcionarios estadounidenses.
Cromitie, de 44 años, y David Williams, de 29, fueron declarados culpables por los ocho cargos que se les imputaban, mientras que Onta Williams, de 34, y Laguerre Payen, de 28, sólo por siete. La fecha para su sentencia será el 24 de marzo, cuando los acusados sabrán si enfrentarán penas a cadena perpetua. El fiscal Preet Bharara calificó al terrorismo generado dentro EU como una amenaza seria.
