Ya está aquí Halloween y es el momento de ir dejando volar a la imaginación sobre los disfraces que vamos a lucir ese día.

Para conseguirlo no hace falta gastar mucho, sino tener buenas ideas… o saber copiarlas. Por eso hoy te traemos algunas formas de cómo hacerlo del portal F5.

El perro muerto viviente

Si tienes mascota en casa, solo tienes que buscar una pintura fosforescente o una tiza para que brille en la oscuridad y dibujarle un esqueleto, tal y como se muestra en la imagen.

Cuando apagues la luz parecerá que es el esqueleto de tu perro quien se mueve por la casa.

Un difunto en el baño

Consigue bolsas de basura gigantes, un balón de fútbol, cualquier cosa para rellenar el cuerpo y algo de pintura roja y deja apoyado en el cuarto de baño o sobre la ducha lo que simulará ser el cuerpo de una víctima que no has sabido dónde esconder. De lo más económico y tétrico para una noche como esta.

Huesos de cadáveres

Las calaveras o falsos huesos humanos son uno de esos objetos imprescindibles para Halloween. Enterrarlos sobre la tierra o colocarlos sobre algún objeto como se puede ver en la foto, servirán para generar el ambiente necesario que queremos para matar de miedo a nuestros invitados.

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La alfombra de la entrada… sobre una muerta

Qué mejor para recibir a tus amigos el día de Halloween en casa que haciéndolos entrar chafando las piernas de una difunta. Si además logramos acompañar esta alfombrilla con algún otro aderezo sangriento y de sonidos inquietantes que salgan de detrás de la puerta completaremos la ‘bienvenida perfecta’.

Toalla con sangre de niño

Si tienes niños pequeños o eres un manitas pintando, uno de los objetos que más horror puede generar a tus visitas es encontrarse con una toalla llena de marcas de sangre con la forma de una mano de niño. Sólo necesitas alguna toalla vieja y pintura roja.

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Tu cabeza en formol

En la misma línea de objetos tan tétricos como económicos encontramos la fotografía de tu peor cara (o de algún amigo tuyo) metida en un jarrón tintado con agua que simula ser una cabeza cortada y metida en formol. Internet está lleno de tutoriales que indican, paso a paso, cómo conseguir este impresionante y realista efecto.

Sangre en el coche

Cuando llegue el momento de salir de casa para tomar algo, nada mejor que hacerlo en un automóvil que simule haber atropellado a aquellos que se han puesto en tu camino.

Gracias a una pintura especial que se quita fácilmente de la carrocería, podremos lograr un efecto tremendamente realista.