POR FRANCIS MESA
Aprovecho este espacio, el que se me brinda para expresarme tan libremente, para unirme, si se quiere y de alguna manera, a las voces de protesta que se han levantado en todo el país para clamar por un cese a la violencia. Porque nos está afectando a todos. Porque cada dominicano tiene un familiar, un amigo o un conocido que ha sido asesinado, asaltado o violado (toco madera).

No es que me esté saliendo, necesariamente, del tema del espectáculo y la televisión, que es lo que me corresponde, no. Porque Milton Peláez, humorista y músico, fue producto de esta vorágine. Porque presentadores, cantantes y periodistas han sido víctima y no podemos quedarnos ajenos a ello.

Porque mientras veía la televisión, en los programas «No hay dos sin tres» y «Con Freddy y punto», observé la peregrinación que lleva a cabo la madre del joven Eduardo David Rodríguez, quien fue atropellado por un vehículo en la avenida 27 de Febrero, junto a familiares y amigos, quien llena de valor, interpretó el tema «Cuando un amigo se va», de Alberto Cortés y lo dedicó a todos los caídos por la criminalidad.

La intervención me conmovió hasta las lágrimas. Porque me sentí vulnerable e impotente. Porque, por muy centrados que estemos en el mundo del espectáculo, no nos podemos sentir ajenos a lo que pasa a nuestro alrededor. Porque mientras estamos muy campantes pensando en el juicio de Acroarte-Dueños del Circo, en los problemas entre Corporán y Luis Medrano, en denuncias de embarazos y abandono, el país hierve y quema. Y nos consume. Como humanos debemos plantearnos cosas y cuestionarnos, por ejemplo, quiénes somos en realidad, qué queremos de la vida y hacia dónde vamos. Por eso, yo también me uno a muchos dolores y penas, porque sueño con un país en paz lleno de seres humanos psicológicamente aptos, no en total paranoia, como nos estamos viendo.

MODELOS A LA VISTA DE TODOS

No sé hasta qué punto es «comercial» el hecho de que se produzca un reality show para escoger modelos. Hace unos días vi al buen amigo Sócrates Mckney, a través de Digital 15, en su faceta de «buscador de talentos» y quedé impresionado. En lo que a mí respecta, el método no me gustó.

Sí, ya sé que lo ha hecho Tyra Banks para Sony Entertainment, donde la bella negra era despiadada con las «niñas» aspirantes a top models. Ahora, nuestro experto local se involucra en algo parecido, desde la agencia que regentea, para buscar a la próxima Ford Model Dominicana (valga la cuña) y a muchos les pudiera gustar, a mí, no.

Exponer a esas jovencitas al escrutinio público y más que esto, a la vergüenza de ser rechazadas ante las cámaras, no me parece justo. Que este tipo de programas tengan mucha trascendencia a nivel internacional, no me interesa.

Yo pienso en que estas chicas (regularmente venidas de extractos sociales no muy favorecidos) con el sueño de ser una gran «Miss» sean «afeadas» ante todos, incluso me parece cruel.

No entiendo por qué no se hizo otro tipo de programa, aunque con el mismo objetivo. Pero si eso es lo que exige el «show biz», adelante, que siga la fiesta. Hasta la próxima.