Hace cinco años que Tomás Chen llegó a República Dominicana procedente de Taiwán para  desempeñar el cargo de Consejero de prensa y cultura en la sede diplomática de su país. Desde su llegada  inició dos misiones, la primera fue la que le confirió su Gobierno aquí, y la segunda establecer una gran amistad con sus colegas dominicanos.

Y para muestra un botón, pues el derroche de cariño y afectos que se puso de manifiesto en el almuerzo de despedida que se ofreció en su honor en el restaurante Bella Cristal, reafirmó que logró sus dos objetivos.

Allí se dieron cita representantes de los medios de comunicación con quienes  Tomás compartió en diferentes escenarios para despedirle y a la vez agradecerle la amistad que se logró a través de su persona entre Taiwán y RD, que pese a que está ubicado en el Caribe tiene mucha similitud con el país oriental.

Luego de degustar de la gastronomía taiwanesa y compartir en franca camaradería con el homenajeado, el embajador de Taiwán, Isaac Tsai, en su intervención de agradeciendo  valoró la labor de quien fuera primero su compañero de universidad y posteriormente de trabajo.

“Amigos, hoy estamos aquí para despedir a Tomás, quien finalizó su excelente misión aquí y damos la bienvenida a Domingo Ja, quien viene a sustituirlo en el puesto”, dijo.

Expresó que Tomás siempre ha contado con el privilegio de la espontánea colaboración de todos y deja gratos recuerdos.

Mini entrevista

Tomás Chen

Consejero de prensa y cultura de la embajada de taiwan

Estos cinco años de labor en República Dominicana han sido los mejores de mi vida”

¿Cóm o evalúa su estadía en RD?

-Me siento muy felíz de poder trabajar aquí durante cinco años, la gente es muy acogedora, la defino como moneda sin rostros, es decir que no discriminan, tienen un corazón abierto y de ustedes aprendimos a ir al colmado, comer pica pollo y beber cerveza Presidente.

¿Al llegar aquí, le fue difícil a usted y su familia adaptarse?  -Claro que no; al día siguiente nos integramos  a la vida cotidiana del dominicano y nos sentimos muy bien.

A su entender ¿qué similitud tiene RD con Taiwán?  -Aquí,  al igual que en mi país, quedan las huellas de los indios y nosotros tenemos 14 tribus.

En estos cinco años, ¿cuáles lugares conoció?   -Hicimos viajes a Las Cuevas de las Maravillas, Bahía Luperón, Cabo Rojo y Los Haitises y lo que más me encantaba era hablar con las personas que residen en esas zonas, pues son humildes, sanos, de corazón puro y hablan un idioma más sencillo.

¿Lo que más le encantó de RD? –  Visitar Samaná, comer mangú, casabe con aceite de oliva y beber una  cerveza bien fría.

¿Si le propusieran volver? – Claro que no dudaría en regresar a este país donde dejo tantos amigos y del que me llevo gratos recuerdos.