El presidente del Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD), Hatuey De Camps, espera que la crisis en el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) será resuelta debido a los informes que tiene de que sus protagonistas Hipólito Mejía y Miguel Vargas Maldonado están negociando la solución.

Tengo entendido que están negociando. Hipólito es un hombre que sabe de empresas y de comercio, porque ha sido comerciante y empresario, y Miguel por igual; y saben también cuando no hay mucha liquidez económica hacer trastrueques y cambalaches, negociación que conceptualizó como un principio aplicado desde la organización de la sociedad primitiva.

La crisis en el principal partido de oposición surgió luego de que Mejía fuera declarado vencedor de Vargas Maldonado en la convención celebrada en marzo pasado para escoger al candidato presidencial de esa organización para los comicios del año próximo.

De Camps, entrevistado en Propuesta Matinal que se transmite de lunes a viernes de 7:00 a 8:00 de la mañana por el canal 45, estimó que en ese proceso votaron 400 mil personas, pero que las partes tradicionalmente se ponen de acuerdo para abultar la participación con fines propagandísticos.

En cuanto a la denuncia de Vargas Maldonado de que militantes de otros partidos concurrieron a esa votación, De Camps estimó que Miguel, que favoreció el padrón abierto, no puede determinar por quién habría votado esa militancia peledeísta y reformista, más aún cuando un hijo de Peña Gómez los estuvo exhortando a votar por el propio Vargas Maldonado.

Sin embargo consideró que la composición de la comisión organizadora de la convención presagiaba la derrota de Vargas Maldonado, porque el presidente de la misma, Emmanuel Esquea Guerrero, había sido derrotado por Miguel cuando le disputó la presidencia del PRD, lo mismo que a Milagros Ortiz Bosch. Mientras que el doctor Hugo Tolentino Dipp, el tercero de sus miembros, fue postulado por Miguel a diputado pero luego intentó despojarlo, y eso no se lo perdonará.

En tanto, consideró que Quico Tabar, quizás el que tendría menos hacha que afilar, debe ser más amigo de Mejía que de Miguel. En otro orden, objetó las conclusiones de algunos analistas en información pública que juzgan igual a todos los partidos emergentes, obviando que el suyo ha demostrado que permanece sin aliarse reivindicando sus mismas posiciones, en tanto otros actúan como rémoras de los partidos grandes para, igual que ese pez, garantizarse las moronas que desprenden el tiburón.

A eso sumó que no haya una vocación en los emergentes de plantear un programa común, un plan único y procurar una candidatura consensuada, en lugar de lo cual son víctimas o asimilados, comprados por partidos grandes que los suman a sus planteamientos al margen de ideologías.

Por otro lado, este es un país de muchas sorpresas y citó como ejemplo la cantidad de cámaras que debieron ser instaladas y no se ha hecho, una acción doble de premeditación que llega a estafar al propio presidente, que en caso de ser cierto debe ser sancionado de manera rápida.

En cuando a si el país requiere de una mayor presión tributaria, De Camps citó que la misma actualmente es de 24% y no de 13%, como asegura el ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Temistocles Montás.

Cuando se está en un hotel grande o pequeño en medio de un incendio la persona se desespera porque el ascensor se desactiva, y los bomberos preparan colchones para amortiguar la tirada, que es lo que hace el ministro Montás, para ver si la población lo resiste, un aumento de la presión tributaria.

Citó que en una reunión a la que fue invitado por el presidente Leonel Fernández, junto a Montás y el delegado del Fondo Monetario Internacional, éste funcionario extranjero declaró que el país es donde más caro se paga el consumo de una electricidad deficiente.

Recordó que durante el gobierno de Salvador Jorge Blanco él negoció con el FMI y se percató de que en el país se enmascara la presión tributaria que en la ocasión (1982-86) era de casi un 20 y el ITBIS la mitad del actual, de 6%.