Decenas de mujeres cañeras reclamaron ayer su regularización migratoria y la entrega de su residencia permanente, alegando que llevan décadas en el país.
Su coordinador, Jesús Núñez, precisó que en lo inmediato exigen documentos para 13 mil de 23 mil cañeras y sus descendientes, todos residentes en los bateyes.
Después de entregar un documento con sus demandas en la Dirección General de Migración, declaró que la próxima semana tendrán una reunión con las autoridades para entregarles el listado completo de los solicitantes.
Según Núñez, son 23 mil los casos de mujeres afectadas. Sin embargo, solo 13 mil de esos casos están debidamente registrados y documentados. Los 10 mil restantes están en proceso de elaboración.
La manifestación fue realizada frente a Migración, y se extendió hasta el mediodía porque Núñez entró a la entidad para depositar el referido documento.
Allí fue recibido por representantes de la institución, quienes le prometieron canalizar los reclamos a través del Palacio Nacional.
Así pues, la decisión final depende de la voluntad del presidente Danilo Medina, y Núñez lo sabe.
La ocasión fue aprovechada por las manifestantes para expresar las penurias que están atravesando.
En efecto, Eugenia Royer afirmó que no ha podido declarar a ninguno de sus 10 hijos porque, sencillamente, carece de documentos, a pesar de que lleva 67 años en el país, donde entregó sus mejores años en la industria azucarera.