POR PEDRO GERMOSEN
El Senado prometió estudiar la solicitud del equipo económico del Gobierno para que apruebe sin enmiendas el proyecto de reforma fiscal, el cual se propone sancionar en una sesión convocada para mañana jueves.

Sin embargo, trascendió que la pieza habría caído en un «tranque» que la comisión especial tratará de superar en una reunión que realizará hoy a partir de las 9:30 de la mañana.

El secretario de Finanzas, Vicente Bengoa; el director de Aduanas, Miguel Cocco, y el director de Impuestos Internos, Juan Hernández, urgieron a los senadores a que aprueben la reforma fiscal con el arancel del 25 por ciento a las importaciones de jarabe de maíz, tal y como lo hizo la Cámara de Diputados.

Informaron que el presidente Leonel Fernández sometería próximamente otro proyecto de ley para atender los reclamos de los azucareros y otros sectores productivos que objetan aquella pieza.

Explicaron que la reforma fiscal constituye una condición para la firma del acuerdo «stand-by» con el Fondo Monetario Internacional (FMI), así como para el mantenimiento del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos.

Por su lado, el sector azucarero advierte que resultaría severamente lesionado si se elimina el arancel al jarabe de maíz, el cual, afirman, sería utilizado aquí por los fabricantes de refrescos y jugos enlatados como sustituto de los azúcares de fabricación nacional.

Bengoa, Cocco y Hernández hicieron el planteamiento del gobierno a los miembros de la comisión especial, que preside el senador Tommy Durán, de Puerto Plata, durante una reunión que empezó a las 10:20 de la mañana y se prolongó hasta las 12:30 de la tarde en la presidencia del hemiciclo.

Luego de la reunión, Bautista García dijo que el Senado estudiará la propuesta del gobierno, mientras Bengoa resaltó la armonía que hubo durante las conversaciones.

Sin embargo, trascendió que entre los miembros del organismo legislativo hay serias divergencias y enfrentamientos respecto a la solicitud del gobierno de los Estados Unidos para que se elimine el arancel al sirop de maíz.

Una parte de ellos, encabezada por el vicepresidente del Senado, César Matías, de Valverde, favorece que se atienda la solicitud de los norteamericanos para evitar que sea suspendido el Tratado de Libre Comercio (TLC) que el país firmó con Estados Unidos y Centroamérica.

Por otro lado, Vicente Castillo, de Peravia, y Pedro Antonio Luna, de Sánchez Ramírez, emergen como cabeza de otra corriente que favorece el mantenimiento del arancel en defensa del sector azucarero nacional.

Otros aspectos de la reforma fiscal que generan controversias en el Senado son el relativo al gravamen a los préstamos para viviendas y la demanda de la Asociación de Industrias para que se elimine el ITBIS a las maquinarias importadas.

Esta entidad entiende que ese arancel se convertiría en un costo para las industrias.

Los comisionados, informó el senador Alejandro Santos, de Salcedo, se comprometieron además a revisar la ley 28-08, sobre desarrollo fronterizo, para adecuarla a la realidad del país.

De todas formas, Santos consideró que el pleno senatorial aprobará sin enmiendas, para convertir en ley, la reforma fiscal en la sesión de mañana.

Si el Senado acoge la solicitud del gobierno y aprueba sin enmiendas, en dos sesiones, la reforma fiscal, este proyecto se convertirá en ley y sólo quedaría pendiente la promulgación por parte del Poder Ejecutivo.

Si, por el contrario, elimina el arancel a las importaciones de jarabe de maíz o introduce cualquier otra modificación, luego de aprobarla, el Senado tendría que devolver la pieza a conocimiento de la Cámara de Diputados.

En este caso, según el artículo 40 de la Constitución, si los diputados no acogen las enmiendas del Senado, la reforma fiscal perdería vigencia y, para conocerla, habría que iniciarla de nuevo en cualquiera de los cuerpos legislativos.