Yelitza Lora no era una de esas personas que en su niñez veía su futuro en la comunicación. Ella se imaginaba más como una mujer de negocios, y por eso inclusive estudió Administración de Empresas.
Sin embargo, es en la comunicación donde se ha afincado y ha recorrido un largo trecho, que recientemente alcanzó las 15 primaveras; fiesta que se dio el gustazo de celebrar por todo lo alto junto a sus amigos, colaboradores, patrocinadores y personas que le han visto crecer y desarrollarse en esta carrera.
“Una de mis principales satisfacciones es saber que a pesar de lo difícil que es, una está en la tómbola. Es un mérito cuando hay tantas personas que cada día tratan de entrar por alguna vía al entretenimiento”, indica Yelitza a ¡Alegría! tras señalar que a los once años fue sacada de su barrio La Esperanza con una pinta urbana para participar en un ‘casting’ de un comercial de televisión, que finalmente terminó siendo un concurso de belleza.
Recuerda que en la agencia Refiné le enseñaron a comportarse como una damita.
Al inicio de su carrera trataba de imitar el estilo de la veterana locutora María Cristina Camilo, pero después comenzó la búsqueda de su propio estilo.
“Yo le agradezco al entretenimiento que me haya permitido, aunque no se sea a un precio muy bajo, estar a base de mi autenticidad y mi personalidad. Yo creo que eso cuesta más que cualquier cosa. Encajar en el molde es muy sencillo, pero destacarse entre tantas mujeres talentosas por lo que tú eres, ese ha sido uno de mis grandes logros”, afirma e indica que la primera vez que habló por un micrófono fue en las actividades de su colegio, adonde hace poco regresó a impartir unas charlas para motivar a los jóvenes a ejercer su derecho al voto.
Ya de manera profesional dijo que fue Ángel Puello quien le puso un micrófono en las manos y le dijo: “Usted puede comunicar”.
Quince años después, la joven está agradecida del cariño del público y de que la hayan aceptado tal y como es. “Yo no nací ni en Naco ni en Piantini, yo soy una muchacha de un barrio, que decidió avanzar. Lo que yo realmente he sufrido en esta carrera es que mi madre llegó a llorar por comentarios negativos y que otros familiares hayan dejado de ver algunos programas por esa razón”.
Cambio. Entre sus planes está transmitir su programa “Otra cosa” a través de su canal de YouTube. “Entiendo que a través de esta plataforma puedo conectar con otro público que consume contenido e informaciones en las redes sociales”, afirma Yelitza.
No es botella. Yelitza se integró en el 2007 al proyecto del presidente Danilo Medina. Al año siguiente, cuando se produjo el enfrentamiento entre Medina y Leonel Fernández, en el que el segundo resultó ganador de la nominación presidencial por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y de la presidencia, la comunicadora empezó a trabajar en Edeeste.
“Yo tengo testigos de eso. Cuando salía del programa “Perdone la hora” pasadas las doce de la medianoche, tenía que trabajar en horas de la mañana en Edeeste. Todos los días iba allí a trabajar, porque era asistente administrativa”, explica y a seguidas añade que cuando Medina ganó la presidencia le preguntaron si quería trabajar y que inmediatamente respondió que sí porque es una mujer laboriosa.
La joven trabaja en el área de relaciones públicas del Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel), específicamente en el Centro Cultural de las Telecomunicaciones.
“Más que un horario yo tengo trabajo que cumplir. Nosotros somos una división y tenemos que difundir las noticias a todos los medios. ¿Quién crees tú que lo hace? Yo no tengo que estarle poniendo etiquetas a todo el trabajo que se hace, ni tengo que estar subiendo fotos en Indotel. Ese no es el trabajo”, dijo.
Entiende que porque una persona ponche una tarjeta eso no quiere decir que esté trabajando. Ella está dispuesta a demostrarle a quien sea que sí trabaja.