Algunas recetas de helados que podrían llamarse dietéticos, son realmente tan exquisitos que hasta los que no hacen dieta te lo agradecerán. ¿A qué esperas para probarlo?
YOGUR HELADO CON SABOR A CACAO
Ingredientes:
650 gramos de yogur natural
100 miligramos de leche
125 gramos de miel
65 gramos de azúcar morena
50 gramos de cacao en polvo sin azúcar
25 gramos de chocolate amargo
Esencia de vainilla, una cucharadita
Preparación:
Calentar al baño María la leche, la miel, el cacao, el chocolate rallado y el azúcar. Una vez disuelto, dejar enfriar, agregar la esencia. En un recipiente aparte, batir el yogur e ir agregando lentamente la mezcla anterior hasta que quede perfectamente homogénea.
Pasar la mezcla a un recipiente metálico, taparlo y congelarlo hasta que tome consistencia. Interrumpir el proceso de congelación varias veces, removiendo con una batidora o un tenedor tratando que se formen cristales cada vez mas pequeños.
Nuestro consejo: acompañamos este helado con una salsa de naranja.
Colocar 1 taza de jugo de naranja y su cáscara en una cacerola, reducir durante tres minutos. Retirar del fuego y agregar 1/2 taza de Grand Manier.
HELADO DE TÉ
Ingredientes:
1/2 litro de infusión de té
1 taza de jugo de naranja
1 cucharadita de ralladura de limón
10 g de gelatina sin sabor
1 taza de agua
2 yemas de huevo
1 clara de huevo
200 g de queso petit suisse descremado
Edulcorante a gusto
Preparación:
Mezclar la infusión de té con el jugo de naranja, la ralladura de limón, la gelatina en polvo sin sabor diluida con el agua y las yemas batidas. Llevar a fuego moderado revolviendo hasta que la preparación se caliente. Retirar y dejar enfriar. Agregar el queso petit suisse y endulzar a gusto.
Aparte, batir la clara a punto nieve bien firme y unir de a poco a la preparación de té, mientras se mezcla con el batidor. Verter en cubetas y dejar enfriar en el congelador durante 20 minutos. Retirar y revolver. Colocar nuevamente en el congelador hasta enfriar a punto helado.