Las actividades deportivas y recreacionales causan más de 31,000 heridas en los ojos cada año y la mayoría de estos accidentes son prevenibles. En 1988 fue estudiada la incidencia de heridas causadas en los ojos por los 10 deportes más favoritos. Estas actividades contaron un 70% de las heridas producidas por deportes. De todos los deportes estudiados el más comúnmente asociado con trauma ocular fue el Basquetball el cual resultó en más 5,500 casos de heridas en los ojos. Otras actividades recreacionales pueden causar heridas en los ojos. Estas incluyen pesca, «juegos de guerra», bailes acrobáticos y fuegos artificiales. Cerca de un tercio de las heridas relacionadas con deporte y recreación ocurren en niños de 5 años a 14 años. En éste grupo, el baseball es el deporte que más herida causa. La severidad de las heridas en los ojos producidas por deportes varía desde pequeños rasguños hasta traumas severos en la córnea que pueden causar visión impar o hasta ceguera. De hecho más de un cuarto de las heridas en los ojos en todas las edades está relacionada con recreación.

Tres clases de trauma pueden resultar de las heridas producidas en deportes: Abrasión Corneal, un rayón en la superficie externa del ojo, usualmente es dolorosa pero no severa. La causa más común en deportes y recreación es el rasguño causado por la uña de un dedo. Muchos jugadores profesionales del basquetball usan protectores para los ojos para protegerse de las heridas. Heridas por Golpes ocurren cuando el impacto de un objeto (bola de tennis, raqueta, el puño, o el codo) cause una compresión repentina en el ojo. Las heridas suaves por golpes algunas veces solo causan sangrado en los párpados o producen un ojo negro, también una hemorragia en la subjuntiva del ojo se puede desarrollar. Este sangrado proviene de vasos sanguíneos de la conjuntiva que descansan en la superficie superior externa blanca del ojo. Ninguna de éstas clases de sangrado le produce un riesgo al ojo. Sin embargo, de éstas heridas, algunas se llegan a ver en casos más severos en los cuales el ojo recibe daño. Los síntomas de heridas severas no siempre son obvios, por eso es importante que siempre que el ojo sufra una herida debe ser vista por el oftalmólogo.

Uno de los resultados más comunes de trauma por golpes es el sangrado en el frente del ojo, entre la córnea clara y el iris coloreado. Esta condición comúnmente es llamada hematoma. Además, el golpe puede causar una cortada rasgadura en los párpados, los cuales pueden necesitar una sutura especial. También las paredes óseas que rodean el ojo pueden resultar fracturadas por un golpe severo. Traumas severos por golpes pueden producir daños importantes en las estructuras internas del ojo como la retina y el nervio óptico resaltando en una pérdida permanente de la visión. Por todo esto, si usted sufre una herida por golpe en el ojo, vea a un oftalmólogo tan pronto como le sea posible. Las heridas penetrantes ocurren cuando objetos extraños penetran en el ojo. Una causa muy común de éstas heridas en los niños son las pequeñas pistolitas de dardos. También un pedazo de vidrio de algo roto durante un juego puede penetrar en el ojo. Heridas penetrantes frecuentemente causan severas amenazas de pérdida de visión. Los signos de advertencia de una herida seria incluyen: Pérdida de la visión, Sangrado interno en el ojo, cuerpo extraño dentro del ojo. La evaluación de las heridas en los ojos relacionadas con los deportes, es la misma que las heridas oculares causadas por otros tipos de trauma. Muchas heridas traumáticas como golpes en la cabeza con pérdida de la conciencia son siempre tratadas primero. Una atención pronta enseguida de producirse la herida aumenta las posibilidades de preservar la visión. La primera recomendación de auxilio es colocar un protector sobre el ojo herido para prevenir un daño mayor (si no se tiene a la mano una cubierta para proteger el ojo, puede con cinta pegante colocar la parte inferior de un vaso de cartón y cubrir el ojo). Busque ayuda médica para el cuidado del ojo herido tan pronto como sea posible. El tipo de tratamiento dado depende de la herida. La cirugía puede ser requerida para reparar los datos del golpe o retirar objetos que han penetrado en el ojo. El mejor tratamiento, como dice el dicho, es la prevención. La mejor prevención de una herida al ojo cuando se está involucrado en deporte y recreación es llevar puestos protectores especiales designados para la protección especial de los ojos. Si éstos protectores no pueden eliminar el riesgo de sufrir la herida por lo menos reducen el chance de sufrirla. Los anteojos regulares y los lentes de contacto no ofrecen una adecuada protección de las heridas causadas en los deportes. Como ya mencionamos por el contrario los lentes pueden inclusive causar rasguños y cortes del ojo.