Herido por Cheney sufre infarto

Herido por Cheney sufre infarto

CHICAGO, EEUU, (AFP).- Harry Whittington, el hombre de 78 años que el vicepresidente estadounidense Dick Cheney hirió accidentalmente mientras cazaban, sufrió un problema cardíaco ayer, martes, debido a que tiene un perdigón cerca del corazón, pero su vida no corre peligro inmediato, dijeron sus doctores.

Los perdigones “básicamente están alojados en cierta área causando inflamaciones. Cuando eso ocurre causa irritabilidad”, dijo en una conferencia de prensa David Blanchard, jefe del servicio de urgencia del Christus Spohn Hospital Memorial en Corpus Christi, Texas (sur).

“Por el momento no hay planes para operar y remover ese perdigón”, dijo por su parte el portavoz del hospital, Peter Banko.

“El proyectil está fijado en el corazón actualmente. Sin embargo será necesario que monitoreemos al señor Whittington por otros siete días en el hospital para estar seguros que otros perdigones no se desplacen a órganos vitales, así como que éste no se mueva a ninguna otra parte del corazón”, añadió.

Cheney disparó accidentalmente con su escopeta al abogado en el cuello, cara y pecho el sábado, mientras ambos cazaban codornices en un rancho de Texas.

El portavoz del hospital dijo que están en contacto con los médicos de la Casa Blanca para discutir la mejor manera de tratar a Whittington, que tiene decenas de perdigones en el cuerpo.

Mucha gente puede vivir con trozos de metralla en sus cuerpos sin sufrir complicaciones graves, dijo Blanchard. El problema es que hasta que no cicatrice, hay riesgo de que los perdigones (de cinco milímetros de diámtro cada uno) puedan moverse y causar irritación e inflamación, como ocurrió con Whittington.

La noticia del incidente no fue revelada inicialmente por la Casa Blanca, sino por la dueña del rancho texano donde ocurrió, Katharine Armstrong, quien habló con el diario local Corpus Christi Caller-Times, que la llamó luego de recibir el dato.

El portavoz del presidente George W. Bush, Scott McClellan, así como la portavoz de Cheney, Lea Anne McBride, insistieron en que la demora de la Casa Blanca para confirmar el hecho se debió a que estaban preocupados de los cuidados médicos de Whittington.

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