Hoy 
POR ANSELMO SILVERIO
SANTIAGO.- Diez reclusos resultaron heridos de cuchilladas durante una pelea que se registró anoche en «la celda de castigos» de la cárcel de Rafey, donde fueron incendiados los colchones, confirmó el alcalde del presidio, Domingo Sosa.
Todos fueron identificados como José Valentín Rodríguez Diloné, de 28 años;Wander Familia, de 26; Pedro Pablo Vásquez, de 34; Francisco Joel Muñoz Gómez, de 22; Edwin Miguel López, de 24; Aquiles Fermín Bautista, de 28; Robinson Silverio Almonte, de 23; José Santos Sosa, de 25 y José Francisco Almonte, de 26 años.
Dos bandas rivales de presos concentrados en la misma celda se disputaron un negocio de drogas, el cual fue la chispa que alteró el ambiente hasta registrarse el motín que se inició a las 800 de la noche.
En el incidente salieron a relucir cuchillos y punzones fabricados con varillas que sirven de barrotes a las celdas, donde además otros reclusos incendiaron colchones para presionar a los custodias a abrir las puertas.
El alcalde de la cárcel dijo, en principio, que Rodríguez Diloné, al que apodan Balín, había muerto en la trifulca, pero se confirmó que estaba vivo, con heridas en distintas partes, el que está preso por homicidio.
Los heridos eran operados anoche en la sala de emergencias del hospital José María Cabral y Báez, donde no hubo acceso para los fotógrafos y camarógrafos.
En la puerta principal del centro de salud fueron apostados miembros de la seguridad que sólo dejaron pasar a los periodistas.
Los custodias del penal amenazaron con disparar, pero lograron controlar el motín y someter a la obediencia a los presos envueltos en la trifulca. Una hora después lograron controlar el gran desorden que se registró en la celda.
Algunos de los reos fueron trasladados a otras celdas para evitar nuevos enfrentamientos. A «la celda de castigos» habían sido llevados por su mal comportamiento, según supo este diario, en tanto el jefe del recinto ordenó redoblar la vigilancia.
El fiscal, Raúl Martínez, se presentó poco después al presidio para enterarse con el comandante y el alcalde del recinto, de la forma en que ocurrió el motín y las circunstancias que lo rodearon.
