Hieren gravemente y despojan de armas dos agentes de  DNCD

Hieren gravemente y despojan de armas dos agentes de  DNCD

POR R. GONZÁLEZ
Dos agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) fueron heridos de gravedad a balazos por desconocidos y despojados de sus armas de reglamento, en hechos separados ocurridos en la Provincia Santo Domingo.

El portavoz de la DNCD, Roberto Lebrón, identificó a los heridos como el cabo del Ejército Nacional Felipe Medina Pérez, asignado a la División Sur, con asiento en Barahona, y Carlos Cedano Plasencia, perteneciente al departamento de Operaciones y Logística, en la sede central.

Medina Pérez permanece en estado delicado en el Hospital Central de las Fuerzas Armadas donde fue recluido  a consecuencia de herida de bala en el cuello. Fue atacado a dos cuadras de su domicilio, a las 11:00 de la noche del pasado  sábado, de acuerdo al informe preliminar sobre el incidente. Iba acompañado de su mujer hasta el momento no identificada.

Asimismo, Cedano Plasencia recibió heridas múltiples en el abdomen y en brazo izquierdo. El hecho se produjo a las 9:30 de la noche, en la calle Club de Leones del Ensanche Ozama, cuando el  miembro de la DNCD acompañaba a una amiga a tomar un carro del transporte urbano hacia la avenida Sabana Larga.

Lebrón comunicó que las pesquisas sobre los hechos están a cargo de miembros del Escuadrón de Investigación de Homicidios de la Policía, pero que el presidente de la DNCD, mayor general Rafael Radhamés Ramírez Ferreira, ordenó hacer las indagatorias de lugar sobre ambos episodios.

Las heridas al  agente Cedano Placencia  le causaron daños en la región paravertebral izquierda, lesión en la vena iliaca derecha, en la arteria safeno, perforaciones múltiples en los intestinos y en el colon.

 Fue ingresado a la Clínica Integral del Ensanche Ozama por varios transeúntes que observaron el incidente.

El vocero del mayor general Ramírez Ferreira aclaró que “Medina Pérez y Cedano Placencia no estaban en servicio” al momento de ser atacados por los desconocidos. El primero estaba de permiso y el segundo estaba libre, es decir que “no podemos hacer ningún tipo de especulación en ambos casos”.

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