SANTIAGO. El adolescente que en la tarde del martes mató de tres balazos a su padre Juan Antonio Martínez, contó a los investigadores policiales y a un fiscal adjunto, que lo mató porque maltrataba física y verbalmente a su madre, Isabel Domínguez, y a sus hermanos.
El vocero de la Policía, Antonio Calvo, dijo que en contra del menor, nadie fue a interponer una querella.
Los familiares de la víctima, todos, se apersonaron en esta jefatura para en vez de poner una querella contra el menor de 17 años, lo dejáramos en libertad por entender que su pariente era una persona aparentemente difícil, dijo Calvo.
El muchacho fue sometido a la justicia.
Testigos aseguran que los maltratos que recibió el menor que mató ayer a su padre de tres balazos, fue el único motivo que lo llevó a cometer el crimen.
El adolescente fue catalogado por amigos, familiares y vecinos como un joven estudioso y ejemplar, incapaz de cometer el hecho, sin ser impulsado por las atrocidades que hacía su padre contra todos.
Estamos seguros que él cometió el hecho para que Juan no matara a su madre, dijo un vecino.
Martínez, chofer de la ruta A, quien falleció instantáneamente debido a múltiples heridas de arma de fuego que se las ocasionó su hijo, se levantó bien temprano, llamó a su hijo y lo obligó a montarse en el carro para que lo llevara donde estaba su madre y supuestamente matarla.
Como no quiso decirle dónde estaba su madre, ya que ellos estaban dejados, Juan, realizó dos disparos a sus pies. Yo supongo que el muchacho se impresionó y en un descuido tomó el revólver y le tiró, dijo un familiar.
Aseguró que Domínguez, se había ido de la casa varias veces por el comportamiento agresivo de su esposo.
El cuerpo de Juan Antonio Martínez fue velado en su casa, con la presencia de algunos familiares, entre ellos su madre, no estuvieron sus hijos. Poco llanto se escuchó en el entorno.