WASHINGTON.  AFP.  Hillary Clinton, bajo el efecto de diez derrotas consecutivas ante su rival Barack Obama, está obligada a ganar las próximas primarias en Texas y Ohio, el 4 de marzo, si pretende mantener viva su chance de ser la candidata presidencial demócrata en los comicios de noviembre.

 Y una simple victoria en esos dos estados podría no ser suficiente. Para invertir la tendencia actual, Clinton tendrá que ganar con un margen importante frente a su rival, quien no ha perdido  desde el «supermartes» del 5 de febrero.

 Para recuperar sus opciones, la ex primera dama necesita ganar en Ohio y Texas «con más de 20 puntos de ventaja», aseguró el director de campaña de Obama, David Plouffe, quien no obstante advirtió que «Clinton es una adversaria dura» y que la pelea por la investidura estaba lejos de haber terminado.

 Harold Ickes no descartó que la incertidumbre de las primarias  se mantenga hasta los caucus a principios de junio en Puerto Rico.