(2 de 4) Durante el período de descanso o baja producción, los caballos sólo necesitan lo suficiente para su mantenimiento. Aunque el caballo no esté utilizando energía, los procesos normales de su cuerpo continúan en actividad. Si el caballo no está ingiriendo la alimentación adecuada para mantener estos procesos, su cuerpo recurrirá a los tejidos grasosos y musculares para proveerse de la energía necesaria para continuar con esos procesos.

Todo buen caballista proveerá a los caballos que no están utilizando con una ración adecuada para evitar desnutrición. No sólo deberán cumplirse los requisitos energéticos con las raciones de mantenimiento, sino que la ración también deberá proveer con otros nutrientes necesarios.

A pesar de que el caballo no sea productivo durante esa época, aún necesitará de proteína, vitaminas y minerales, al igual que de agua y sal adecuada; sobre todo del agua, que es uno de los ingredientes alimenticios más baratos.