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Me siento aliviado, comento Cordero Junior, cuando uno se impone una meta siempre es un alivio lograrlo. He tenido muchos años muy difíciles. Sin embargo, soy como “Reggie Jackson”, el estelar pelotero de los Yankess de Nueva York, -de esa época-, y salgo victorioso antes los grandes retos. Si uno es un campeón, debe salir airoso cuando la presión es máxima. Según el “New York Post”, Cordero ganó su primera carrera el 15 de julio del 1960 el hipódromo “El Comandante” de Puerto Rico, sobre el ejemplar “Celador”. El boricua llegó a las pistas de los Estados Unidos, en el 1962, se mantuvo sobre las mismas durante unos tres meses, ganó una carrera y regresó a su hogar. En el 1965 retornó a los Estados Unidos, se mantuvo uno de los mejores jinetes de su país.