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Con el tiempo, Ribot en un acelerado desarrollo, el hijo de Romanella, se convirtió en un caballo correctamente balanceado y muy equilibrado en sus formas, con paletas fuertes e inclinadas, importantes cajas, buenos pulmones, hombros y lomos poderosos.
En la expresión, el zaino tenía muchos puntos de contracto con su padre. Tenerani, hijo de Bellini y Tofanella que como luego ocurrió con su hijo, necesitó que se le diera tiempo para lograr su mejor desarrollo físico y así poder obtener 16 clásicos en toda su campaña. Ribot, ganador por partida doble del Arco de Triunfo de Francia, quedará en la historia como el caballo a perpetuar el talento de Federico Tesio como criador de la raza. En la pista, la increíble velocidad del zaino estaba respaldada por pulmones.