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La unión de dos corrientes sanguíneas unidas en el cruce producen grandes productos, es decir, la combinación armónica en la reproducción, la combinación energética que produce vibraciones armónicas determina el éxito de la unión de dos corrientes sanguíneas determinadas en los caballos de carreras y ha sido quizás el factor primordial en la formación de la energía nerviosa en el producto nacido de esas armoniosas combinaciones a nivel genético al unirse las células germinales masculina y femeninas. Hasta aquí, la traducción del trabajo de un periódico de Nueva York.
Para concluir esta serie de cuatro entregas, y en vista de que mencionamos a Federico Tesio, debo decir que fue un gran humanista, que unía su clara inteligencia un profundo sentido de observación y notable capacidad de concentración para cada problema.
Sobre sus numerosos viajes a Oriente, le gustaba decir que había aprendido a escuchar las estrellas y hablar con los caballos. Nadie podía igualar la intuición de Tesio para anticipar que caballo llegaría a convertirse en un buen corredor y mejor padre, o que yegua acunaría en su vientre hijos de indiscutible clase. Los lectores de esta columna elogiaron los datos ofrecidos.