(1 de 4)
La verdad es que al haber estado ligado –por tantos años- a las actividades hípicas en la República Dominicana se logra una experiencia indescifrable. En una ocasión siendo nosotros presidente de la Comisión Hípica Nacional, visité la Ciudad de México y, como era natural, conocí el Hipódromo de las Américas, y pude presenciar con mis propios ojos que dentro de sus instalaciones se encuentra la Escuela vocacional de jinetes, muchos de los cuales son exportados para los redondeles de los Estados Unidos. Los avezados exjinetes Alejandro Bravo, Manuel Zavala y José Bravo eran los encargados de convertir la materia prima en mercancía de primera, y lo lograron muy bien, ya que de dicha escuela salieron, en el año de 1985, se graduaron como jinetes Julián Villalón, Eulogio Fierro, Víctor Fierro, Filemón Rodríguez, José de Jesús Baraja, Gerardo Lazárraga, la sensación.