POR UBALDO GUZMAN MOLINA
El ex presidente Hipólito Mejía consideró ayer  “vergonzoso y un disparate” que se gastaran 350 ó 400 horas en el juicio de los invernaderos para que luego se descargaran de responsabilidad penal a los ex funcionarios de su gobierno acusados de presuntas irregularidades.

Según Mejía, si hubiese sido la justicia que controla el gobierno, los acusados de irregularidades en los invernaderos habrían sido condenados a 20 años.

Indicó que durante el caso de los invernaderos se estuvo irrespetando, insultando, calificando de ladrones a los ex funcionarios pasados y ahora la justicia, que no maneja el gobierno, los descarga.

Señaló que al principio cuando llegaron los invernaderos nadie quería participar, porque había que invertir RD$1.0 millón.

Indicó que lo primeros que entraron (al programa de invernaderos) incluyendo al peledeísta Juan Zucco, de San José de Ocoa,  les fue muy bien.

El ex presidente Mejía señaló que los peledeístas pensaban que los dueños de los invernaderos se harían millonarios de un día a otro.

Contó que tiene invernaderos desde hace treinta años y sabe muy bien de la rentabilidad y productividad de los mismos, de los que fue promotor.

La Tercera Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito descargó a los ex funcionarios acusados de repartir irregularmente más de 80 invernaderos, que ya habían sido descargados en primera instancia.

Mejía hizo los señalamientos, tras la dirección perredeísta reunirse con el ministro de Educación Superior de Cuba, Fernando Vecino Alegret.

Indicó que los invernaderos se pueden conseguir en España, Cuba y Francia y que había que ser extensivo eso “a los compañeros del PRD y ampliarlo”.

A su juicio, el futuro de la agricultura del país son los invernaderos, pero entiende que ya se relajaron.

 Indicó que está molesto con su invernadero y que un día de éstos lo eliminará.

Consideró que la instalación de invernaderos es una vía expedita para entrar al mercado norteamericano, así como al europeo.

Expresó que hay que quitarle las casas a los peledeístas en la avenida Luperón, que se financiaron ellos mismos con dinero del Instituto Nacional de la Vivienda y el Banco de Reservas.

En cuanto al Plan Renove, Mejía dijo que el gobierno ha montado un espectáculo deprimente y recordó que todo el mundo (los gobiernos) ofertó vehículos nuevos a los choferes.

Indicó que el gobierno pasado dio órdenes a 19 compañías, pero que la mayoría no podía y sólo lo hicieron unas cuantas.

Expresó que Antonio Marte, “que no está con nosotros”, ha pagado casi RD$400 millones por los autobuses asignados del Plan Renove.

Indicó que hubo autobuses que fueron regalados a la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y a las asociaciones de estudiantes.

 Precisó que los estudiantes de Palenque y Villa Altagracia tienen derecho a venir a estudiar a la UASD en vehículos regalados por el Estado.

“¿Se las van a quitar a esa gente? ¿Es un robo dárselas a los estudiantes? Eso es un disparate. Pero, bueno, la justicia se encargará de eso”, sostuvo Mejía.

Por otro lado, el ex mandatario dijo que está dispuesto a participar en cualquier diálogo con el gobierno, porque tiene 50 años en eso, aunque cree que la administración peledeísta no sabe dialogar.

Consideró una falta de respeto y una forma de exclusión, la invitación al PRD para que participara en la cumbre del gobierno y que llegara en la noche de anteayer.

Indicó que el Tratado de Libre Comercio de Centroamérica y República Dominicana con Estados Unidos (DR-CAFTA) y la comisión cambiaria son buenos para el país.

Explicó que si se elimina el recargo cambiario hay que buscar dinero de otro lado para compensar la pérdida de esos ingresos.

Indicó que no se puede seguir castigando con los tributos al mismo sector y, además, es potestad del Congreso hacer las rectificaciones de lugar, sin chantaje, al proyecto de reforma fiscal sometido por el gobierno.

Señaló que los sectores clase media y baja ya no soportan más impuestos, quienes “están feos para la foto y para todo”.

Cuando se le preguntó si conocía el “plan b” que aplicaría el gobierno si el Congreso no le aprueba la reforma fiscal, Mejía dijo: “No, porque yo soy del PRD y no estoy inscrito en el PLD todavía, ni pienso inscribirme”.