El expresidente Hipólito Mejía citó como los más relevantes logros de su gobierno (2000-2004) el fortalecimiento del poder municipal, la Ley de Seguridad Social, la Ley de Medioambiente, la Ley General de Salud, el Código Monetario y Financiero, la ley del Mercado de Valores, la Ley de Seguros, y, la ley que otorga Autonomía Presupuestaria y Administrativa a la Procuraduría General, al Ministerio Público y a la Cámara de Cuentas, como usted bien lo menciona.
También, el exmandatario destacó su impronta en el plano internacional, teniendo que enfrentar con su audacia el impacto político y económico de los acontecimientos del once de septiembre de 2001, y es así que asumimos con decisión la defensa de los intereses dominicanos negociando nuestra inclusión en el Tratado de Libre Comercio de Centroamérica y los Estados Unidos, CAFTA, el que, con nuestro empeño y arduo trabajo diplomático devino, con nuestra inclusión, en el ya conocido DR-CAFTA.
En una carta de agradecimiento enviada al licenciado Magín Díaz, por los conceptos emitidos en su artículo publicado en un periódico de circulación nacional, sobre su extinta esposa, la exprimera dama Rosa Gómez de Mejía, expresa que “Durante sesenta años tuve la dicha de poder contar con la mejor consejera. Sabia, discreta, amorosa, de gran calidez espiritual, sensible al interés de la gente. Me refiero a mi querida esposa Rosa.
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Hoy, a pesar de no estar más conmigo, su ejemplo, su fe, su temple, me alientan a no desmayar en la lucha por los mejores intereses del pueblo dominicano”.
“He leído con mucho interés su artículo del 25 de abril pasado en el prestigioso medio “Acento”, donde se refiere a la partida de mi muy querida esposa Rosa, así como a los hechos que dieron como resultado las decisiones que impulsamos durante nuestro gobierno en el período 2000-2004”, resalta el exmandatario.
Mejía resalta en uno de sus párrafos: “Por supuesto, los argumentos condenatorios que de que fui objeto en aquel momento, emitidos en medio de los embates de la impensable crisis bancaria que tuve que enfrentar en la segunda mitad de mi período de gobierno, así como de los interesados juicios que se emitían al fragor de la campaña electoral, de cara a las elecciones del año 2004, tenían por objeto, de parte de la población más afectada, descargar el pesado fardo con que les golpeaba la quiebra del Baninter, y, de parte de políticos opositores, argumentar la supuesta torpeza con que nos habíamos manejado, para hacernos cargar con el peso de aquella crisis, a cambio de obtener la simpatía de los electores”.
Afirma que antes de enfrentar el pesado fardo de la mencionada crisis bancaria, no tuve titubeos para echar a andar, como presidente, muchas iniciativas pendientes en aquel momento, las que hoy forman parte del entramado político y social que reviste de garantías el ejercicio ciudadano de cara al gobierno que me han sucedido.
“Es preciso reconocer que la arrogancia de unos y la mediocridad de otros ha pretendido soslayar las circunstancias, hechos y acontecimientos en medio de los cuales me tocó gobernar y los resultados de mi accionar político. Sin embargo, puedo asegurar que duermo con la tranquilidad que me da el haber actuado con espíritu absolutamente democrático, y poniendo siempre primero el interés de las dominicanas y los dominicanos”, enfatiza el expresidente Hipólito Mejía.
Mejía finaliza su misiva de agradecimiento al licenciado Magín Díaz con el párrafo siguiente: “Reitero, distinguido amigo, mi agradecimiento por su amabilidad y simpatía, la que viniendo de un profesional de su experiencia y talla me halaga sobremanera, al tiempo de garantizarle las muestras de mi alta consideración y amistad sincera».